MAJO CURITAS.[ANUEL AA] ;

CURITAS-012.

Todo estaba mal.

Peor que mal.

Me encerré en el baño en cuanto vi a Emmanuel haciendo movimientos sospechosos.

Movimientos sospechosos en cuestión: despertarse.

¿Con qué cara iba a verlo ahora?

—¿Que tu has hecho qué?

—¡Baby, no oigo!

—Nooooo, pero entonces hay que botarlo.—fruncí el ceño porque Paris estaba teniendo una conversación consigo misma.

—¿Botar a quien?.—escuche de fondo un golpe y después la risa escandalosa de la parisina.

—Que chismoso, Armando, ella no ha dicho nada aun solo quería ver si era cierto que los hombres pueden ser más chismosos que nosotras.

—Que buena relación, os odio.—dije antes de sentarme sobre la tapa del inodoro.—Ayer Emmanuel llegó de la casa de sus suegros con mal sabor de boca, le dijeron par de cosas malas porque me trajo a RD.

—No es culpa tuya lo que sea que me dijeran, no puedes responsabilizarte por la inmadurez y el odio de otros hacia ti.—Dino para tranquilizarme.—Perdón por cortarte mami pero necesitaba que eso te quedase claro.

—Gracias.

—Pero dale, cuéntalo de una buena vez.

—Pues dijo que Frabian y yo nos interpusimos en su misión de sentir algo por Yailin, quería hacerlo por como las redes se portaron con él tras karol.

—¿Y te interpusiste porque....—abrió los ojos cuando pareció conectar todos los puntos y comenzó a chillar.—¡Yo sabía!.—me señaló.—Eso de a dar agarrados de la mano, por Dios si ustedes no hacen más que decir que se odian, estaba bien raro.

Miré mis manos, ni siquiera me daba cuenta de que hacíamos eso, menos me iba a fijar en que alguien lo notase.

—Nos besamos.

—Puaj.

—Tu besas a Luar.

—¿Yo qué?.—se quejó.—Solamente estoy acá viendo la tv, no me ande atacando.

—Perdón.—dije riéndome.

—Como vuelvas a meterte con mi marido, te elimino de mi testamento.

—Oh, mami pero hablando es que se entiende la gente.

—¿Qué harás?

—No sé, creo que volveré a casa porque esto no está bien, habrá tensión y será raro porque...

—¿Hicieron algo más?

—Pues sí, no llegamos a acostarnos pero si hicimos todo lo anterior y...

—¿Mamaste?

—Deja de gritar, por Dios, mejor vaya y lo pública no sé, reúnete con Chente y ya , mándale un voice a Rapeton.—la escuché reír.

—¿Lo tiene gr..

—¿Que si tiene qué?.—vi como Luar apagó la TV y se cruzó de brazos esperando la respuesta de mi amiga.

—Nada, no dije nada.

Elevé mi pulgar para calmar su curiosidad.

—¿Te gustó?

—¿Quieres probar?

—¿Me dejas?

Ahí el tipo se levantó y salió de la sala.

—Pobre Armando, hoy le tocó Armar show.