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Nota
Este capítulo contiene escenas no aptas para menores de edad, leer bajo su responsabilidad.

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El omega con olor a fresa estaba escondido en el armario mientras olía la ropa del alfa. Hoy en la mañana su celo había llegado y su lobo rogaba por el alfa pero Bin salió en la mañana al pueblo a ver algunas cosas del campo de entrenamiento.

- Minnie, ¡¿Estás en celo?! - cuestionó un pelinegro muy alterado entrando a la habitación, buscando al omega por toda la habitación.

Dong Min salió del armario con una prenda de Bin en sus manos - Aquí estoy, Binnie

- ¿Estás bien? ¿Quieres que pida algo para tu celo? - interrogó, está vez era la primera vez que el omega entraba en celo en su estancia en el imperio.

- Mi lobo y yo te necesitamos a tí - respondió con algo de timidez - ¿Me vas ayudar?

- ¿Estás seguro de querer pasar tu celo conmigo, cariño? - preguntó mientras abrazaba al omega

Dong Min asintió. - Por supuesto, alfa. Somos predestinados, estamos casados y nos queremos... Ayúdame, ánda

Bin beso los labios del omega con delicadeza, Dong Min colocó sus manos en los hombros del alfa y empezó acariciar el cuello de Bin.

Bin beso los labios del omega con delicadeza, Dong Min colocó sus manos en los hombros del alfa y empezó acariciar el cuello de Bin

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- ¡El rey Hwang In Yeop de Camelot! - anunció un guardia.

Bin sonrió al escuchar eso, vio como el alfa entraba con una gran sonrisa en su rostro. ¿Cómo se atrevía a venir a su imperio después de todo el daño que le hizo a su omega e intentar humillar el día de su boda? Quería golpearlo, ganas que no le faltaban.

- Rey Hwang, una disculpa por mi vestimenta... Verá, estaba atendiendo unos asuntos privados - con su mano peino su cabello un tanto desordenado.

- Oh, lo entiendo. Yo también solía atender a mi harem cuando estaba con su actual emperatriz - tomó asiento en la silla.

Bin rió y negó levemente. - ¿No está enterado? Veo que solo se informa de lo que quiere, rey Hwang.

El Omega Del Emperador Moon - BinwooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora