❱ 03.

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Sentía el cuerpo pesado, me latía la sien y sin siquiera abrir los ojos tenía la sensación de que todo daba vueltas

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Sentía el cuerpo pesado, me latía la sien y sin siquiera abrir los ojos tenía la sensación de que todo daba vueltas.

Un teléfono sonó a mi lado y el sonido hizo que la cabeza me doliera como el infierno. Encontra de mi ser, junte todo mi esfuerzo y abrí los ojos viendo la familiaridad de mi habitación.

Me senté en la cama y trate de localizar mi teléfono, lo tome de mi mesita de noche y conteste la llamada sin ver quien era.

—¿Si? —pregunte estrujándome los ojos. Un grito se oyó desde la otra línea antes de que escuchara la voz de alguien.

¡Tú! —abrí los ojos por completo; de pronto toda pereza habia desaparecido y en su lugar un sentimiento de enojo tomo mi cuerpo.

—¡Young-seo, te juro que te voy a matar! —grite a mi hermana menor. Me senté mejor en la cama—. ¿Tienes idea del desastre que paso anoche? ¡Espero que te disculpes al menos hasta que cumplas los ochenta!

¿Yo, disculparme? ¡La única que merece una disculpa aquí soy yo! —contradijo a lo que me enoje más.

¡Ja! ¿Qué se creía para hablarme así?

—Tú, pequeña mocosa.. —dije molesta—. Hice todo lo que me pediste: fui grosera, mimada y coqueta. ¿Y sabes que? ¡Me llevo a un hotel! —exclame y se quedó callada—, ¡deje que me secara el escote, Young-seo! ¡El ESCOTE!

Young soltó un quejido que casi pareció un sollozo.

¡Unnie! —hizo un berrinche como si fuera una niña, fruncí el ceño al escucharla así. Casi podía ver su puchero—. ¡El señor Kang quiere casarse!

¿Qué el señor Kang quiere que cosa?

—¡¿Qué?! —me levante tan rápido de la cama que casi me caigo. Cuando logre sostenerme de algo reze por haber escuchado mal—. ¿Qué dijiste?

¡Quiere casarse, Yoo-min! ¡Y no conmigo, contigo! —repitió a nada de llorar—. Tú fuiste a la cita a ciegas, ¡dime que paso! ¡Yoo-min!

𝗖𝗔𝗦𝗘 𝟭𝟰𝟯, kang tae moo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora