8. BRASIL

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_____ Morgan Müller

Me quedo al lado de mi madre por horas con la esperanza de que así como cerró los ojos un día como hoy, lo abra nuevamente.

― Oye ya casi junto lo necesario para conseguir algo que te cure ― le hablo, no fui a las instrucciones que se supone debo tomar con la élite, hoy no tengo  humor de andar fingiendo y Morgan se fue temprano ― ¿Sabes? ― saco mi teléfono y enciendo la pantalla para mostrarle la foto que tengo de fondo.

Somos Lucifer, Manuel, Maze y yo en el Lux en Halloween hace unos años.

― Él es Lucifer, me regaló este collar ― le muestro el dije que cuelga de mi cuello y lo abro como si tuviera la esperanza de que lo vea ― Somo tú y yo ― los ojos se me encharcan ― Lo siento, lo siento ― la voz me tiembla ― no quería llorar hoy.

Me llevo una mano al bolsillo y saco una de las pastillas de éxtasis y le doy la espalda para meterla en mi boca, me tomo mi tiempo en lo que los efectos se presentan y le hablo cuando siento que todo está mejor.

― Él es Manuel, un dolor de cabeza a decir verdad ― reconozco ― Ummm... ya no está aquí, se fue y creo que no lo veré más, pero no importa ― vuelvo a prender mi teléfono cuando la pantalla se apaga ― Ella es Maze, jugaba conmigo y me enseñó a defenderme, así no dejaré que te hagan daño de nuevo ― tomo su mano ― Ya no nos van a dañar.

Me quedo a su lado y me echo sobre su abdomen como solía hacerlo cunaod vivíamos juntas, espero a que despierte no sé por cuanto pero alguien entras y debo levantar la cabeza aturdida.

― Morgan, el general te mandó a buscar ― el capitana Magazine, por el que me castigaron la otra vez, entra como perro por su casa y me levanto ― Morgan, es urgente.

― Uno, no me llame Morgan prefiero Muller o cualquier pendejada que desee soltar ― contesto saliendo y lo saco a empujones de la habitación de mi mamá ― Dos, ¿Ahora qué hice para que me venga a buscar hasta el hospital?

― Ya te dije que el general te está buscando ― me regaña y me lleva por los pasillos al parqueo.

Pasan un par de horas hasta que llegamos a la central cuando llego me yergo y camino al lado del capitán, pero noto que todos me miran como con lástima.

¿Qué paso?¿Acaso apareció un cartel indicando que un día como hoy me jodieron la vida o qué?

Al llegar Sabrina está llorando a mares y con los ojos hinchados, el general Peñalver me mira preocupado y yo espero a que el capitán se largue.

― ¿Qué le sucede a Cruella? ― pregunto apuntando a Sabrina, ella suelta un sollozo.

― ____ ― habla el general ― hoy en la mañana nos informaron que el avión en el que viajaban el coronel Christopher Morgan y la teniente Rachel, explotó.

¿Dios? ¿Al fin me estás sonriendo?

― ¿Y ahora qué hago?.

― El grupo que vino haciéndose pasar por soldados en realidad eran infiltrados, el avión envió una señal de auxilio hace unas horas ― explica y aunque trato de no ser una hija de puta y sentirme mal no puedo.

Supongo que la vida es así, un día abandonas a tu hija y al otro tu avión explota. Sinceramente el bienestar de Christopher me da igual, me siento poderosa por haberle deseado que se muera y ahora su muerte es casi un hecho...

― Vaya pues que pena ― digo y Sabrina solloza ― Que descanse en paz.

― No, ____ ― dice el general ― tenemos sospechas de que pudo escapar pero el avión explotó encima de la selva amazónica y esta perdido ahí.

ENEMIGOS (T/N en Pecados Placenteros)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora