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Capítulo 7 - Ten cuidado en como le hablas

A lo lejos se podían observar varios autos algunos venían llegando y otros estaban disfrutando de ese momento, algunas chicas con poca ropa, musica por todos lados y otros ya listos para comenzar una carrera.

Dominic y su equipo habían llegado y hacia tanto calor que quemaba la arena, todos buscaban un lugar para que no les pegaran el sol porque acabarían sedientos y cansados. Vince logro conseguir una carpa para que pudieran disfrutar de todo lo que se les presentará.

Brian aún no llegaba y todos, en especial Laila lo estaban esperando, ya querían ver cómo ese auto en el que se habían esmerado tanto hiciera comer polvo a los demás.

Laila no estaba segura de competir puesto que ella quería ver primero a su novio pero Letty la terminó convenciendo y cuando menos se dió cuenta ya se encontraba junto a los demás autos a punto de comenzar la carrera.

—Oye nena, solo ve lo carrera porque sino se cansará ese lindo rostro y eso sería una pena— ambas chicas no supieron a quien se refería por lo que ambas voltearon a ver.

Letty no le prestó mucho caso pues no tenía sentido discutir con aquel idiota, pero Laila no hizo lo mismo. —Mejor apuesta algo de dinero en lugar de hablar idioteces, ¿Que te parece dos de los grandes?

—Entonces si gano te acuestas conmigo— le dio un vistazo a ambas chicas —no, mejor ambas se acuestan conmigo.

—Si quieres sexo mejor ve al bulevard Hollywood, si quieres jugar adrenalina apuesta dos mil— contestó Letty.

—Aquí, ahora mismo, ¿Que dices?— dijo Laila enseñando el paquete de billetes.

—De acuerdo.

Laila iba de piloto y Letty de copiloto, antes de acelerar se dieron un par de miradas y sonrieron sabiendo que aquel idiota no sabía lo que le esperaba, estaba apunto de perder con la hermana de Dominic Toretto.

La carrera comenzó, Laila iba justo a lado del idiota pero por un momento el la arrebazo casi nada. —¡Te lo dije nena! Es una pena que sus hermosos rostros tengan que ver la parte trasera de mi auto.

Letty y Laila solo rieron ante aquel acto. —¡Adios!— dijeron ambas al mismo tiempo y Laila presionó el nitro dejando atrás a todos y como era de esperarse ganaron.

En cuanto Laila bajo del auto vio a Brian que ya llegó mientras ella estaba compitiendo y el cual alcanzo a ver cómo gano aquella carrera.

Laila corrió a los brazos del rubio abrazándolo y dándole un pequeño beso.

—Te estaba esperando— dijo Laila unos segundos después de separarse de aquel beso.

—Que bien lo hiciste.

—Lo sé— contesto con orgullo y ambos se echaron a reír para luego dirigirse con los demás tomados de la mano.

—Hola tortolitos, ¿Que tal les va?— Jesse acababa de bajar del remolque y ante aquel comentario la joven pareja no pudo evitar soltar un par de carcajadas.

—Que tal Jesse— contestó Brian mientras ambos seguían a Jesse.

—¿Que te traes entre manos?— pregunto Laila que pudo notar algo inquieto a su amigo.

—Estoy apostando el auto, cómo lo hiciste tu Brian.

Laila y Brian se dirigieron un par de miradas. —Apuestas el Jetta

—Si.

—Es una locura, Jesse no puedes apostar el auto de tu padre— contestó Laila.

—Esta bien, no voy a perder, el tonto tiene un Honda 2000, ganaré, entonces yo y mi padre podremos viajar cuando salga de prisión— Laila se quedó callada pues sabía lo que era querer estar con tu padre, que el estuviera orgulloso de ti y solo verlo una vez más...