3. Insurrección

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Portland.

Otoño. Una temporada hermosa. El suelo de los bosques se cubría con las hojas doradas caídas de los árboles. 

Oregon, Estados Unidos.

Café fue vertido desde la cafetera a la taza. Unas galletas acompañaban a la taza, encima de un plato de cristal.

6:00 A.M

Ambas reposaban en una mesa grande y alta al aire libre, frente a un campo con un río, que se encontraba al lado de una silla en la que estaba él.

Ojos verdes, piel morena como el azúcar, pelo corto y negro. Altura, 1.90, bastante alto para alguien. Cuerpo con algunos músculos.

Él era Lucas Holkenborg.

Tomó un sorbo del café, a la vez que tomaba una galleta y se la comía. De pronto, escuchó una explosión proveniente del granero, y de adentro salió un ¿misil? Que salió disparado hasta llegar a un lado de Lucas, pero a una distancia considerable, levantando polvo y humo.

El humo se fue dispersando, y la luz solar que pasaba a través de los árboles dibujó la silueta de un hombre, tirado boca abajo en el suelo con su mano agarrando lo que parecía ser una mochila de hierro en forma de jet con dos propulsores en cada lado de la ala.

Aquel hombre levantó entonces su rostro del suelo y miró a Lucas.

Ojos claros, piel blanca, barba corta y pelo negro, y que llegaba hasta sus hombros. Unos 1.80, acuerpado. Apuesto, se podía decir, pero algo descuidado.

Él era Matthew Heisenberg.

—¡Oye Lucas!.—Exclamó, tirado, aún con un brazo agarrado a las alas jet.

—¡No funcionará!.—Dijo interrumpiendo sin dejar de leer el periódico.

—¿Recuerdas el jetpack que estaba haciendo mientras no estabas?.—Sin importar lo que dijera su amigo, Matt siguió y se levantó.

—Por poco me volabas el brazo intentando probar el motor.—Respondió Lucas.—No va a funcionar.

—¡Pues creo que te equivocas!.—Contrarrestó Matthew.—Esta vez sí logré perfeccionarlo.

Lucas quitó la atención del periódico y se dedicó a observar el futuro desastre. Matt se puso la mochila.

—Pesa mucho, y se desamarraron las sogas.—Matt intentó volver a amarrar las sogas al jet, pero en su torpeza se le resbaló de sus manos y accidentalmente jaló la cuerda para encender el jet.

El jet salió disparado hacia el cielo y la soga se enredó en las piernas de Matt, quién fue jalado por los pies por el jet, el jet voló hasta el lago, donde ascendió 7 metros antes de chispear en los propulsores y descender.

—Oh oh.—Fue en lo que pensó Matthew al sentir que bajaba.

El jet cayó al lago antes que Matt, elevando mucha agua al cielo.

Lucas suspiró y volvió a mirar el periódico. Minutos después salió Matt todo empapado y jalando con cada paso el jetpack que estaba amarrado aún a su pierna.

Reach Or Dominion (Ghidorah): ZeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora