Capítulo Uno

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🍁 Al corriente

—¡Aún hay algo mal en tu cabeza! ¡Regresa! ¡Regresa!

La poseída por el Demonio de la Sangre, Power, volvía a golpear a Denji para que despertara tras la paliza que le dio Kishibe. Fue entretenido ver cómo caían de un lado a otro, perdiendo una y otra vez por movimientos predecibles. Cuando se volvía agotador verlos perder, inútiles sobre la tierra, intentaba advertirles de lo que haría el viejo, pero simplemente no escuchaban. Entonces me giraba a pasear entre las infinitas lápidas y cada vez que volvía, me encontraba con el mismo escenario.

Ellos rendidos sobre el suelo.

—¡Oigan! ¡¿A dónde están yendo?!

Al regresar de mis tantas caminatas, vi a esos dos observando la oscuridad de la carretera. Conversaban entre sí, tonterías sobre sentirse más inteligente. Viniendo eso de Power, había poca credibilidad.

—Oye, ¿y qué haremos con ella?

—Hay que comérnosla.

—¿Comérnosla?

Me acerqué a ellos dispuesta a ponerlos en su lugar y escoltarlos hacia su casa. Power hizo lo mismo formando un arma con la sangre proveniente de su mano, pero al momento de levantar su brazo para dar el primer golpe, lo soltó en el aire haciendo que se desvaneciera, esparciendo en el suelo la sangre que le quedaba.

—Mmm —la miré caminando a su alrededor—... ¿Qué acaso no pensaste en que te quedaba poca sangre como para realizar un ataque?

—¿Qué? ¿Cómo sabes eso? —intervino Denji confundido por lo sucedido.

Chasqueé la lengua e ignorando su pregunta volví a Power quien sacaba la lengua exclamando por ayuda debido a la sed de sangre que necesitaba para recuperar fuerzas.

—¿Acaso necesitas esto? —pregunté poniéndome de cuclillas a su altura agitando la bolsa de sangre sacada de mi uniforme. Power al ver esto intentó mover sus dedos para quitármelo.

—¿Cómo conseguiste eso?

Me reincorporé de inmediato cansada de las interrupciones de Denji. Power intentaba arrastrarse hacía nuestra dirección, pero una piedra en su camino finalmente la detuvo noqueándola una vez más. Puse los ojos en blanco hastiada por sus comportamientos, me acerqué a Denji haciéndolo tropezar hasta caer y lo acorralé contra la pista.

—Escúchame —ordené golpeando su cabeza con mi dedo para que no se perdiera, él se mostraba persistente a perder la concentración, pero finalmente logré mantenerlo quieto. Me senté en su pecho para tomar el control y lo miré con disgusto—. Eres un idiota.

—¿Qué?

—¡Silencio! —volví a golpear su cabeza con mi dedo, esta vez haciendo presión en su frente. Denji cayó.

—Vas a obedecer a todo lo que yo te diga. Estás a mi cargo, mi misión es cuidar a que no intentes hacer nada fuera de lo acordado. Tienes un compromiso con Seguridad Pública y si intentas escapar de tus deberes, yo personalmente me encargaré de aniquilarte. ¿Me entiendes?

Denji me estaba mirando, pero no respondía. Agité la bolsa de sangre aún en mano, pero a diferencia de Power, él no tuvo reacción alguna.

—¿Me estás escuchando? Oye. ¡Denji!

Este despertó tras haberle propinado una bofetada. Frunció el entrecejo e intentó moverse, pero mi trasero se aferró a su pecho para que este no lo lograra y continuara escuchando.

—Ya deja de golpearme. ¿Qué te pasa? ¿Y qué hay con esa bolsa de sangre? Si vas a dármelo, hazlo de una vez.

—¡No! ¿Escuchaste lo que te dije?

Problemé d'Émotion » Chainsaw ManDonde viven las historias. Descúbrelo ahora