Relatos cortos

32-Una noche en el desierto

- ¡Tira! ¡Tira! - ese era el grito que se oía por todo el lugar. 

El Behemot, un animal de carga tiraba del castillo alrededor del cual se formaría la nueva ciudad al borde del desierto. Se construiría entre este y las montañas, la intención era vivir de una manera moderna, aunque respetando la naturaleza y lo que está ofrece. 

A los pocos meses con el Behemot habían conseguido formar una ciudad, ciudad fantasma, pero al fin y al cabo habitable. Pasaron los años y la ciudad en el oeste, más allá de las solitarias llanuras paso a ser un mero recuerdo en la mente de los más mayores, y un registro más en la lista de conquistas, fundaciones. 

Pasaron más de tres siglos para que llegará alguien, un forastero llamado Boros. Quien paso de largo con una misión, crear una ruta a través del desierto para conectar una ciudad en el borde de este con otra al otro lado de las montañas. 

Un camino concurrido del que nadie se salía, pero Zoltan, un mercader menor especializado en sedas se salió al atardecer en su segundo día de ruta, inevitablemente le pilló la noche y al verla a lo lejos decidió acercarse a pasarla allí. 

Con su castilloresguardandole y todo dispuesto para acogerlos paso la noche allí.