Imprimación lunar

Capítulo 6

Jacob

Me río fuertemente mientras Edward me hace cosquillas, trato de alejarlo pero él no me suelta.

— ¡Para! ¡Edward, para! – digo entre risas.

— Ah no, hasta que me digas lo que quiero escuchar – dice con una sonrisa traviesa.

Se lo que quiere escuchar pero finjo no saber y eso hace que su suba en mi y siga con las cosquillas.

— ¡Bien! ¡Te quiero! ¡Ya lo dije!

— ¿Qué dijiste? No te escuche.

— ¡TE QUIERO EDWARD! – y solo así paro, mientras sonríe triunfalmente, demonios, adoro esa sonrisa.

— Lo sabia — se me queda viendo a los ojos para luego dirigir su mirada a mis labios, se acerca lentamente y dejo de respirar por un momento, y entonces lo hace, me besa lentamente y luego se separa.

Lo veo a los ojos y se que quiero mas, le tomo de las mejillas y lo atraigo a mi y lo empiezo a besar más.

Siento que quiere meter su lengua a mi boca y yo me dejo, es lo mas maravilloso que había sentido en mi vida, yo gimo de deseo y eso hace que me bese con mas pasión.
Estoy que me derrito, siento sus manos en mis piernas haciendo que las abra para él y yo con gusto lo dejo. Cuando esta encima de mí siento que voy a morir.

Se empieza a mover lentamente haciendo que haya fricción, el gruñe y eso me excita muchísimo, lo rodeo con mis piernas y él sigue con su frote. Se mueve más rápido y fuerte haciendo que jade y gima como loco, él me besa el cuello y me da mordiscos pequeños mandando un onda de calor a mi miembro.

Puedo sentir su miembro duro y me vuelvo loco, no puedo creer que yo pueda hacer que se excite por mi y me encanta.
Siento su mano entre nosotros y siento que trata de bajarme los pantalones y yo con gusto lo dejo. Me los baja haciendo que solo mi miembro salga erecto y siento su mano en él, el me agarra con fuerza y empieza a masturbarme.

— ¿Te gusta? Dime cariño, ¿te gusto lo que te hago? – dice con la voz ronca.

— S-si, n-no pares, sigue po-por favor – y él complaciéndome lo hace, gimo más fuerte y entonces siento tensión en zona baja, mi respiración se vuelve más rápida.

— Correte cariño, correte para mí, ¡hazlo! – me ordena y lo hago. Grito por mi liberación y abrazo a él, queriendo que esto sea para siempre.

— Yo también te quiero, eres mío Jake, solo mío, mi amor – dice viéndome a los ojos, yo solo asiento.

Él me dice algo, pero no lo escucho.

— ¿Que dijiste? – él vuelve a hablar pero sigo sin escucharlo, él sigue hablando pero no entiendo nada.

Entonces escucho un sonido como una campana, suena y suena, trato de pensar que es ese sonido.

¡Jake! ¡Jake! !Jake!

Y entonces siento un golpe.

¿Qué sucede? ¿Qué alguien me diga?

Y entonces despierto.

— ¡Jake! Vamos amigo, deja de dormir quiero salir a correr — escucho la voz de Seth tratando de despertarme.

¡Este mocoso! ¿Qué hace aquí?

— ¡Jaaaaaaakeee! ¡Levántate, vamos amigo! – dice saltando en mi cama, yo gruño frustrado.

— Seth, déjame en paz – me tapo con mis cobijas hasta la cabeza.

— ¡Nop! Vamos, lo prometiste — y empieza a jalarme las cobijas, yo trato de que no lo haga.
Pero sigue jalando mis cobijas, hasta que logra quitármelas y mi pesadilla comienza.