Imprimación lunar

Capítulo 8

Alice

Estos últimos días me ha dolido la cabeza y me estoy frustrando. El futuro de Edward está cambiando, prácticamente ya casi ni lo veo, algo está pasando y no sé qué es.

He estado acompañando a Bella casi todos los días porque Edward se la pasa no sé dónde, es como si ya no le importara. Se supone que deben estar juntos todo el tiempo, pero ahora a cada rato se están peleando.

Incluso Emmeth, Rosalie y Jasper están raros, es como si tampoco les importara. Emmeth y Rose ya no tienen intimidad, lo sé porque mi hermano me lo dijo, su relación está estancada desde hace mucho, más bien están juntos por comodidad y aprecio que por amor.

Yo creo que están bien los dos juntos, solo necesitan algo de aventura en sus vidas y todo volverá a ser como antes.

Mi novio también actúa raro, hace unos días nos peleamos por Ed y Bella, él no estaba de acuerdo con lo que decía Bella y yo la tuve que defender; Jaz no entiende que eso es lo que hace una pareja y de todos modos no vale la pena pelear por eso porque al final ellos se van a casar y punto.

Me aseguraré de eso.

Bella no solo es mi mejor amiga es mi hermana, la quiero mucho y duele verla tan triste porque Edward no quiere pasar el tiempo con ella. Debo hacer algo para que ese par se reconcilie.

Sigo pensando en un plan para unirlos cuando Jasper entra a la habitación.

— ¿Qué pasa Alice, te duele la cabeza? – me mira con preocupación.

— No mi amor, ya no me duele.

— Alice, algo va mal, casi todo el tiempo te duele la cabeza, dime que es lo qué pasa para poder ayudarte.

— Es Edward, su futuro está cambiando y hay aveces que ya no lo veo y eso me frustra, sin mencionar que anda peleado con Bella, ¿sabes que le grito y la insulto? ¡Como pudo hacerle eso! En cuanto llegue de no sé dónde voy a hablar con él – digo enojada.

— Alice yo creo que no debes meterte.

— ¿Qué?

— Esto es problema de ellos, que lo resuelvan solos.

— COMO PUEDES DECIR ESO, ELLOS NOS NECESITAN – exploto contra él.

— Alice cálmate – dice fríamente y viéndome a los ojos enojado.

— ES QUE...JASPER – digo tratando que se ponga de mi parte.

— YA ALICE – me grita y me quedo en silencio, jamás me había gritado.

— ¿Que demonios pasa contigo Jasper? Nunca me había gritado y haz estado muy raro últimamente, ya ni siquiera pasamos tiempo juntos – creo que si pudiera llorar ya lo estaría haciendo.

— No quise gritarte pero hay aveces que siento que te quieres meter en casi todos los asuntos de los demás y es algo que no te corresponde – dice con un suspiro.

— Pero quiero ayudar, nuestra amiga está sufriendo por la indiferencia de Edward y no podemos dejarlo pasar.

— Alice, creo que debes entender también en Edward, él ha pasado por mucho, seguramente tiene muchas cosas en la cabeza; además no es el fin del mundo que por una vez no esté con Bella todos los días – pone los ojos en blanco.

— ¡Estas loco! Ellos se aman, se aman tanto que quisieron matarse por no estar con el otro.

— Ay por favor, Bella jamás se hubiera matado y menos porque su padre iba a sufrir mucho y con Edward, bueno entiendo que es la primera vez que ama a alguien y no sabe qué sentir, él es un adolescente con asuntos del corazón. Creo firmemente que si nunca hubieras visto a Bella lanzarse desde un risco, Edward creo que hubiera seguido con su vida y quizá podría haberse enamorado de alguien más, sin mencionar que Bella estaba bien con el lobo ese. – ahora si creo que perdió la razón.

— ¡No me menciones a ese perro! Aun puedo sentir su asqueroso olor, ademas Bella es solo su amiga.

— ¡No seas grosera Alice! Son lobos no perros – me dice furioso.

— ¡Es prácticamente lo mismo! ¿Por qué ahora los defiendes? No son de los nuestros. – ya estamos otra vez alzando la voz y creo que nuestros gritos se escuchan por toda la casa.

— ¿NO SON DE LOS NUESTROS? ELLOS SON COMO NOSOTROS

— ¡NO LO SON! ESAS COSAS SON ANIMALES SALVAJES

— CÁLLATE, NO PUEDES JUZGARLOS

— SI PUEDO PORQUE SON ASESINOS – entonces agarra un jarrón y lo estrella contra la pared, yo me sobresalto.

— ¿Y NO SOMOS TAMBIÉN ASESINOS? – me dice con dolor y se que la he cagado, se lo mucho que le duele haber matado a muchas personas en su vida pasada.

— Jaz, yo... – intentó acércame a él, pero retrocede.

— Solo aléjate Alice – y se va de la habita cerrando la puerta de un azoton, es la primera vez que discutimos.
Quiero ir por él para hablar, pero decido que mejor es dejarlo respirar y que se calme.

Debe entender que esos perros son una amenaza, además de que debo convencerlo de ayudarme a juntar a Bella y Edward, cuando eso suceda estaremos bien todos, eso lo sé