Capitulo 8

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<Narra Alma>

Apenas escuché el horrible grito comencé a buscar con la mirada para ver de que se trataba. No tardé en darme cuenta que venía de Hannah.

- ¿Qué pasó? - preguntó un pálido Paul a mi amiga que sollozaba y temblaba sin control.

- Me duele mucho. - logró decir de manera casi inentendible y sin dejar de llorar.

Mi preocupación sólo parecía aumentar cada segundo, miré a mi alrededor en busca de la causa del dolor de Hannah y en ese momento Seth, que estaba a mi lado me agarró por la espalda, atrayéndome hacia el de manera brusca.

Sorprendida lo miré sin entender que pasaba.

- ¡Cuidado! - gritó y entonces pude ver de lo que me había querido prevenir.

Mierda.

Centímetros cerca de donde me encontraba hace unos segundos se estaba arrastrando una serpiente. Una muy grande.

Miré a Hannah y al ver como palidecía ante la imagen terminé de confirmar lo que creía.

- Hay que buscar un médico, ¡Rápido! - exclamó Paul y todos asentimos nerviosos.

Seth me ayudó a recoger las cosas de Paul y Hannah mientras Karlie iba adelante con Matt, quien ayudaba a Paul a llevar a mi amiga. El resto de los amigos de el no seguía. Estaba tan asustada que no dejaba de temblar.

- Alma - comenzó a decir Seth mientras pasaba su mano por mi hombro- Todo va a estar bien, tranquila.

- No...- susurré - son dos horas de camino Seth, ¡Dos horas! - dije alzando la voz, ya no podía más. Me rompí y comencé a llorar en silencio.

El me detuvo en seco colocándose frente a mi y rodeó mi espalda con sus brazos en silencio, la cálida sensación se sentía como una inyección de algún calmante fuerte.

- Lo lograremos, ya verás...

- ¿Y que pasa si no? - dije hundiendo mi cara en su pecho. Con cada respiro que tomaba me impregnaba su olor, iba sin camisa y aun estaba un poco húmedo.

- Oye...- dijo apoyando su barbilla en mi cabeza - ¿Donde está la Alma positiva y buena vibra que me gusta?

En ese instante dejé de respirar.

¿Había oído bien? ¿Dijo que le gustaba?... ¡Pero que digo! No es momento para pensar en eso ni en nada, mi amiga puede estar el peligro. Me aparté de Seth regulando mi respiración.

- Nunca debimos venir. - solté limpiando mis lagrimas y volví a comenzar a caminar.

Me sentí culpable enseguida, Seth se esta portando muy bien, mejor que nunca me atrevería a decir y acabo de ser una nube gris grosera y negativa. Por un segundo temí que se volviera la estatua amargada de los primeros días pero honestamente, eso sería lo mejor. Así tal vez dejaría de sentirme así de...emocional.

¿No?

No.

¿A quien engaño? Yo me conozco bien y esto se me está saliendo de control. Necesito que este verano termine pronto.

————*———-

Finalmente, una hora y media después llegamos a la pequeña cabaña con los médicos auxiliares del parque, el lugar estaría vació de no ser por una joven doctora que se incorporó de su asiento apenas vio que entramos con Hannah cargada en brazos.

Le hizo señas a Paul de que la acostara en la pequeña camilla detrás de las cortinas azules y el obedeció sin tardar.

- ¿Saben que le pasó?- preguntó la doctora al grupo. Eramos demasiados para el pequeño espacio por lo que Matt y sus amigos se quedaron afuera.

SERENDIPITY - El viaje-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora