🩸Sanando Cicatrices🩸

🩸⛓️𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 53⛓️🩸

• Sin mi•

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Lo que ha echo Jacob hoy no es algo de esperarse, condujo mientras yo tengo mis pies encima de el y hablando con Emma por mensajes diciéndole que me voy a quedar con el Pomerania, para ella es un Pomerania y me gustaría ver la cara de Jacob si lo supiese, reí de solo imaginármelo.

-¿De que te ríes enana? -me hace cosquillas con una mano en mis pies mientras conduce con la otra.

-De que mi mejor amiga te acaba de mencionar por el apodo que te pusimos. -este puso los ojos en blanco.

-¿Y se puede saber que apodo me pusiste? -dijo mirando la carretera.

-Pomerania. -el me miró perplejo.

-¿Pomerania? ¿Y eso por que? -giró su cabeza para seguir centrado en la autopista.

-Pues, por que te consideramos Pomerania por que eres un bonito por fuera pero por dentro te gusta joder con tus ladridos. -amito y el asintió ofendido de broma.

-Tiene más sentido, pero yo soy mordedor eh. -avisó riendo.

-Si claro. -le desafío sarcásticamente.

-No me retes enana. -me aprieta la rodilla un poco haciendo que me duela y me quejé riendo.

-¡Ya! -apretaba y soltaba para apretar otra vez.

-Ya paro. -dijo y luego se metió en el terreno de la cabaña y dejó ahí el coche.

Quité mis piernas y salí para luego abrir la puerta de atrás y coger mi mochila.

-Tengo hambre. -dice antes de abrir la puerta.

-Yo también. -dije y pasé por el enorme pasillo y luego dejarme caer en el sofá tumbarme.

-¿Me dejas comerte? -deja mi mochila y neceser en un lado y se me echa encima.

-No, yo tengo hambre de verdad. -hice berrinche.

-Toca pedir por Uber eat's, esta tarde vamos a hacer compra, apenas tengo para cocinar. -dijo tumbado en mi pecho y yo asentí.

-Esta bien. -dije.

-¿Que te apetece comer? -me dio el móvil para ver las opciones que elegir y se levantó para ir a la cocina.

-¿Te apetece pasta? -grité desde la sala.

-¡No! -gritó.

-¿Comida china? -eleve más la voz.

-¡No me convence!

-¿Mmm? ¿Paella? ¡Comida Española tiene buena pinta! -aclaré la garganta.

-¡Esta bien, pídela! -dijo más bajito ya que está a la vista con una manzana en mano, me la acercó y negué, mientras tanto hice el pedido.

-No me gustan las manzanas. -en eso le entra una llamada de Victoria, sentí una punzada en el estómago por lo que pasó esta mañana pero más por el echo de que este llamando a Jacob.

-Contéstale. -negué y este rio le tendí su móvil y lo agarró para luego ponerselo en la oreja.

-¡Dime! -respondió con agresividad.

Se quedó callado escuchando lo que ella estará diciendo, luego me miró y sentí un escalofrío.

-¡Si! Mira Victoria ya me da igual, no me des explicaciones. -se sentó a mi lado y yo enseguida me levanté para cruzar mis piernas.