VIII

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Estaba haciendo lo mismo de siempre, pero con más ganas, le emocionaba, un uno minutos vería el Itadori, de nuevo.

Llegó a la casa de Yuuji, y al entrar noto otro auto, uno que no era el de Choso, el cual era el único que estacionaba su auto.

El la puerta estaba Natalia, la mujer que siempre se encargaba de cuidar la puerta y de las pocas personas que usaba un uniforme diferente.

--Oh, Satoru no puedes pasar-- Le dijo cuando vio que estaba abriendo la puerta.

Lo desconcertó.
--¿Por qué Nat?-- Pregunto curioso, en el tiempo en el que iba nunca le prohibían la entrada , de todas formas las únicas personas en la casa, eran los sirvientes, Choso, el y algunas veces sus compañeros junto con Yaga.

--Ordenes--.

Mierda, el no tenía ningún poder contra alguna orden de cualquier Itadori.

--Porfis Nat, no haré nada solo estaré con Yuu, porfis -- Intencionalmente bajo un poco sus lentes era consiente de que la cautivaria  y lo dejaría pasar, puso su mejores ojos de cachorro y suplico --Solo un ratitito, nada de tiempo Nati ¿Si?-- Observó la duda en sus ojos, estaba cayendo.

--Bien, pero por atrás, de todas formas solo te interesa ese-- Lo empezó a guiar.

Y de nuevo noto algo que nunca le gusto. Las personas solía tratar con desprecio a Yuuji, desde hablarle por su nombre, hasta hablar de el a sus espaldas y aún así este siempre los defendía, cuando sabía que se daba cuenta, no sabe por qué, ni lo ha preguntado.

Pero entraron por la parte del almacén.
Por donde pasaban los sirvientes y se vestían. Subieron por otras escaleras que jamás había visto.

Hasta llegar al piso de Yuuji.

--Bien, todo tuyo -- De nuevo, ese tono de desprecio.

Se despidió y continuo caminando.

Estaba en la parte del pasillo que daba a las escaleras y escucho una voz hablar.

--No. Lo que me pides es imposible --.

Choso.

De inmediato se escondió detrás de la pared.

--¿Por qué no? Mejorará más, ya lo había pensado y solo nesecitaba este avance --.

¿Yuuji? No, su voz era distinta, estaba tatuado y vestía ropa formal. Era exactamente igual a Yuuji pero distinto, mucho, si los tuviera a los dos enfrente los distinguiría sin dudar.

Quería ver a Yuuji rápido pero también quería saber, de que hablaban.

--Si, entiendo que le gustará, me preguntó una vez, pero no lo llevaré a un lugar con personas que lo juzguen, el está bien aquí--.

--Mierda, Choso, aquí también lo hacen, con compañía lo logrará, mantenerlo en ese cuarto le hace sentir peor, se siente solo --.

Choso parecía pensarlo.

--Si, entiendo, pero ahora tiene un amigo y con el es suficiente, no irá a la Universidad--.

¿Que? ¿Yuuji? ¿Universidad?
Se emociono un poco con la noticia, hasta que recordó que Choso dijo que no y el estaba a cargo de Yuuji.

--No era pregunta era aviso --. Y con eso el otro tipo se fue.

La conversación que escucho a escondidas termino, así que se apresuró en ir al cuarto del menor.

En el pasillo vio, de nuevo, una fotografía, eran dos personas idénticas «gemelos» no era tan estúpido y Yuuji había mencionado a otro hermano.

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