Las palabras de Gojo fueron muy limpias y puras como el.
Se sentía seguro y confiado con el, no entendía por qué, pero le gustaba Gojo era la persona más honesta que había conocido después de Sukuna.
No estaba seguro de que sentia en concreto por el, pero le gustaba.--Yuuji, ¿Por qué no me hablas de tu pasado? --
La pregunta de Gojo lo hizo recordar que no estaba solo, que estaba hablando con la misma persona en la que estaba pensando. Sintió su cara calentarse un poco.
"-No tengo mucho que decir -" Confesó.
--Vamos, yo he contestado todas tus preguntas, conteste cuatro --.
Estaba negociando la preguntas. Y era cierto el había preguntado mas.
"-No se que contestar -" Se sincero.
--Solo tu familia, tus pasatiempos todo lo que eres--.
Satoru bajo un poco los lentes, dejándolo ver de nuevo esa hermosa combinación del mar y el cielo. De nuevo esos ojos tan perfectos, hermosos, hipnóticos y vivos."-Ya te conté casi todo ayer -" Empezó a mover los brazos, solo por ver los ojos de la persona frente a él "-Pero, no te conté más de mi familia, mi abuelo y abuela fundaron una cadena de restaurantes y después una hotelera, mi padre las maneja actualmente, mientras mi abuelo viaja, Choso es un escritor con una saga muy exitosa, Sukuna hace lo que puede para tomar el lugar de mi padre -"Descanse, había" dicho" mucho, realmente me había agotado.
--¿Y tu madre y abuela? --
"-Fallecieron, ambas de enfermedad-" Una sensación extraña inundó su rostro "-En ese entonces solo estudiaba, nunca supe como, no importa que tanto me esforzara jamás tuve buenas calificaciones, practicaba muchos deportes, probablemente más de los que conozcas, era capaz de cargar muchísimo peso y correr kilómetros sin cansarme... -" Un sentimiento nostálgico, de vacío, me sentí mal, recorde, todo ese tiempo, lo mucho que adoraba mover mi cuerpo, todas esas medallas y trofeos, me hacían sentir bien y ahora, le estaba contando eso a un médico, estaba a un ataque de morir, solo a un centímetro de perder la vida.
No evitó que una lagrima cayera, el no Gojo si.
--¿Lo extrañas? --La voz de Gojo parecía más calmada, más serena y tranquila, transmitiendole esas sensaciones.
No movió sus brazos, sólo asintió con la cabeza.
--¿Por qué no lo recuperas? Se que puede ser difícil pero por qué no te concentras en curarte y continuar --
Volteó a mirarlo, sus lentes estaban abajo, podía mirar esos zafiro directamente, Gojo se acercó, y lo pudo mirar con más detalle, era aún más blanco, incluso sus pestañas eran de ese color siendo la espuma del mar y las nuves en su cielo, los lijeros cabellos que caían parecían ser sedosos y suaves, justo como el algodón de azúcar, y sus labios eran rosa palo, delgados, una fina línea, pero aún así quedaban bastante bien con la cara de esa persona frente a el.
--¿Que dices? Yuuji--La voz de Gojo lo trajo de vuelta, estando tan cerca que sólo susurro. Pensó en sus palabras anteriores, él ya lo había intentado pero fracaso, no importaba que tanto se esforzada, terminaba igual. Miró directamente a Gojo, pudo ver que todo lo que hacía era honesto.
--¿Me ayudarías? -- Preguntó, buscando esperanza. Los ojos de Gojo brillaron y sus mejillas volvieron a tomar un color carmín, que lo hizo ver aún más encantador.
--En todo -- Habló, de forma muy tranquila, con un susurro que le erizo la piel.
De un momento a otro, Gojo se alejo, con un movimiento brusco como siempre.

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Vida...
RomanceUna persona, tan vacía, tan sola, tan cerca de la muerte.... Su única compañía era su sombra. Esa persona se llama Itadori Yuuji, quien a pesar de ser tan joven, está tan cerca de la muerte.