♡| Final feliz, amén

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Focus podía prometer por el recuerdo de Fargan que nunca había volado en picada tan rápido como estaba haciendo en ese momento. Como cuervo prefería los vuelos estables, si bien disfrutaba la velocidad, no era agradable verse tan cerca del suelo con tan poco margen de reacción.

Sin embargo, la situación lo merecía.

El inmenso humo que había rodeado el Santuario se había desvanecido, junto a la lluvia y la noche dorada; las figuras de Juan y Spreen volvían a ser visibles lo cual hizo imposible mantener a Noni tranquilo.

—¡Pero espera a aterrizar! —ignorando sus reclamos, el semi-vaca saltó al suelo desde varios metros de altura.

—¡Spreen! ¡Spreen!

—Hola Noni, si yo estoy bien, tranquilo, no me morí por usar tanta magia, gracias por preocuparte.

—Terrible.

Las manos temblorosas del joven híbrido de humano y vaca rodearon con extremo mimo el cuerpo del agitado oso, retiraron las sucias lentes para poder observar con detenimiento el sonriente rostro tras ellas, y finalmente guiaron el cuerpo del osezno a acurrucarse contra el pecho de Noni.

—Dios, dejé de sentir tu olor por varios minutos y pensé que te habías ido a otra dimensión o algo así.

—Che, estoy bien Noni, tranquilo. —los ojos oscuros del oso se movieron de la vaca que se encontraba al borde del llanto en dirección al hechicero que, usando al Profeta (que sepa Dios cuándo llegó y de dónde) de apoyo, caminaba hacia ellos con una gran sonrisa.— Estoy mejor que nunca.

—¿Sí funcionó entonces? —Focus carraspeó, mirada fija en el híbrido que tiempo atrás había intentado tenerlo de cena.

—No parece que Spreen quiera atacarte, y yo no tengo pensamientos de coger con él, así que diría que funcionó. ¿¡Viste eso papá?! ¡Soy increíble!

—Seguís siendo un maguito de cumpleaños, gafotas.

—¡Oye, ahora sí puedo decirte que me chupes la verga sin que sea raro!

Spreen rió, se sentía cansado, como si su cuerpo le pidiera hibernar antes de tiempo; su cabeza apoyada en el hombro del híbrido castaño que acariciaba y peinaba sus rizos manchados de ceniza. Juan rió con él, todo se había arreglado y ahora podían volver a bromear.

Aunque Spreen sabía que había algo más que debía arreglar. Algo que incluía a sus sentimientos y la pareja de prometidos que eran sus amigos. Sin embargo, eso sería algo para otra historia.

Ahora Spreen quería seguir burlándose del Profeta mientras Noni le regañaba por hacer planes con extraños y Juan se burlaba de las plumas faltantes de Focus.

Así, en ese preciso momento, Spreen sintió que toda esa semana de mala suerte, no había sido en vano.

—Oigan, ¿no deberíamos sacar a Reborn de la bedrock?

Mirado por un tuerto | T!SpreenHaremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora