No quiero ser amada ✿2da Parte 180-228✿

Capitulo 182

Mirando la expresión perpleja de Basil, la Sra. Cessly se golpeó el pecho, frustrada.

"¡Su Majestad la reina quiere trasladar su residencia al Palacio de la Reina Madre! ¡Esta vez dijo que nunca volverá!"

"¿Qué significa eso... por qué Su Majestad de repente quiere..."

"No hay tiempo que perder. Su Majestad el rey no puede hacer nada al respecto. Es todo inútil. El problema es que ella no puede estar en el Palacio de la Reina Madre. Estoy segura de que usted es consciente de esto, Gran Chambelán".

"¡Por supuesto! Eso es porque la Reina Madre te dispararía una flecha en el segundo en que te escucha decir una palabra de incluso si ella m-..."

Basil luego se dio cuenta... todo esto sucedió por lo que le había dicho a Rihannan. Parecía que no era vergüenza, sino una razón más profunda por la que Igor le había ocultado ese incidente.

"Yo... parece que he cometido un terrible error".

Basil inmediatamente despegó, corriendo.

✿✿✿✿✿✿

Cuando llegó al palacio principal, Basil vio a Rihannan salir del edificio hacia un carruaje, lista para partir.

"¡Mi reina!"

Basil apenas llegó a tiempo. Jadeaba irregularmente.

Rihannan ni siquiera lo saludó correctamente. Sus ojos azules lo miraban con frialdad.

"Su Majestad... no puede irse así". suplicó Basilio.

"Basil, hazte a un lado".

"Por favor, al menos considera cambiar de opinión, te lo ruego".

"Si no te haces a un lado en este momento, haré que te corten la cabeza".

La Sra. Cessly, que acababa de llegar, se sobresaltó con las palabras de Rihannan, aunque sabía que en realidad no las decía en serio.

Basil miró a Rihannan, perplejo.

Basil tenía antecedentes de granjero, por lo que muchas personas en el Palacio se mantuvieron alejadas de él. La reina, sin embargo, siempre le había mostrado respeto, dirigiéndose a sus palabras. Era la primera vez que se comportaba así con él.

"¿Crees que no me atreveré? ¿Quién crees que eres?"

Basil tomó una decisión firme en ese instante e inmediatamente se inclinó hasta el suelo. "Entonces, está bien, Su Majestad. Córtame la cabeza".

"¡Basil!"

"Ya he dicho esto antes, ¿no es así, mi reina? Puedes quitarme la vida".

Al escuchar sus melancólicas palabras, Rihannan se puso furiosa.

"Sí, así es. Dijiste que si me mentías, tenía derecho a acabar con tu vida. Entonces, ejerceré ese derecho".

¡A ese Ritmo! Rihannan agarró la espada del guardia más cercano a ella.

"¡Su Majestad!"

Los sirvientes gritaron, se sorprendieron y corrieron hacia Rihannan en un intento de detenerla, pero la Sra. Cessly rápidamente les bloqueó el camino antes de que pudieran hacer algo.

"Quédense atrás. No enfaden más a Su Majestad. Quédense atrás".

Al escuchar la voz suave de la Sra. Cessly, los sirvientes se alejaron de Rihannan.