Todo Lo Que Nunca Fuimos ||Bakugo X Tu||

Cap 11

Un pequeño yo

Cuando me desperté fui a la sala a desayunar como de costumbre. Descubrí a aizawa haciendo desayuno y a bakugo todavía durmiendo en el mueble, el bakugo de 6 años estaba sentado en el muro de la cocina viendo a aizawa cocinar.

—Buenos días...

Aizawa: Buenos días, T/n. Hice desayuno para todos, pero me parece que no todos están en los dormitorios.

—Ah, si. Pues, es fin de domingo así que algunos están en casa de sus padre y otros están haciendo pasantias, creo que solo estamos kirishima, uraraka, toru, shoto y ojiro, y obvio bakugo y yo.

Aizawa: esta bien, Siéntate, voy a servir.

Mientras aizawa servía los nombrados anteriormente iban saliendo de sus respectivas habitaciones, todo el ruido despertó a bakugo quien hizo un gesto de fastidio cuando el "pequeño el" lo saludo desde la cocina.

Más tarde kirishima se ofreció a llevar al pequeño bakugo a una recorrida por la U.A, bakugo estaba sentado a mi lado viendo la pantalla de su celular mientras yo estaba a punto de llorar del estrés que me causaba tener que estudiar un domingo.

No sabía dónde estaba el resto y la verdad no me importaba. Pronto regreso kirishima con el niño que no parabana de exclamar lo aburrido que estaba.

Bakugo: ¿Quieres ver caricaturas?

Bakugo C: ¡Basta de las estúpidas caricaturas! ¡Quiero jugar a los héroes!

Bakugo; Esta bien. —Suspiro. —Juguemos.

Bakugo C: ¡Tu no! Te quedas dormido a la mitad del juego. —Se quejo y cruzo los brazos. El otro bakugo miró cansado a su amigo buscando ayuda.

Kirishima: Lo siento, bro. Tengo que estudiar para el examen... —Hubo unos segundos de silencio. —Pero tal vez jugar con muñecos sea divertido.

Bakugo Chiquito se contento al instante sin embargo el otro no estaba tan de acuerdo.

Bakugo; No gastaré dinero en esa estupidez. —El pequeño a su lado se quejo entre lloriqueos.

—No es necesario gastar dinero. —Como si por fin notarán mi existencia voltearon hacia mi. —¿Las madres casi siempre guardan cosas de cuando éramos niños, no? De seguro tu mamá todavía guarda tus juguetes preferidos, te puedo acompañar si quieres.

Kirishima; ¡Hey! Esa idea es genial.

Bakugo C: ¡Si!

Bakugo: No. No. No. De ninguna manera vamos a mi casa.

—¿Por que no?

Bakugo: Por que ahí esta la vieja bruja.

—¡Bakugo! —Le tire el lápiz que tenia en la mano. —¡Respeta a tu madre! Vamos, no seas terco. Será rápido. —El seguía negando con la cabeza. —Entonces supongo que prefieres pasar el resto del día escuchando el berrinche de Kats?

El apretó los ojos y al momento de abrirlos Soltó todo el aire en sus pulmones.

Bakugo: Bien. Iré.

—Voy contigo.

Bakugo: ¿Que no estas estudiando?

—Estaba buscando la excusa perfecta para mandar estas ecuaciones a la mierda, y esta parece cerlo.

Kirishima: ¡Que les vaya bien entonces! —Nos dedico una última sonrisa antes de irse a su habitación.

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