۵ small truths ۵

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Solo para que sepan, quizá lloren un poquito... Solo poquito...

Se recomienda leer este capítulo con The beauty of acceptance de Nell [Sana] y Matilda de Harry Styles [Jihyo]

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Se recomienda leer este capítulo con The beauty of acceptance de Nell [Sana] y Matilda de Harry Styles [Jihyo].

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Las luces cálidas de la noche apenas podían alumbrar el camino, Sana daba cada paso con rabia descontrolada, nada ni nadie sería capaz de hacerla entrar en razón, era una maldita cobarde, se sentía como la peor persona del mundo por no poder revelar toda la mierda que había ocultado hasta ese momento.

"Todas las personas mienten" dijo a sí misma al buscar una excusa que aliviara su corazón, "Si, pero ninguna como tu" sus pies se detuvieron, había miles de seres humanos diciendo mentiras piadosas y mentiras destructivas en los segundos que tardaba en respirar, así que ¿Por qué la culpa de engañar le presionaba el pecho de esa forma?

¿Cómo es que todos eran unos cínicos cuando mentir hacía tanto daño?

- ¡Sana! - la voz de la amiga a la que menos quería ver puso sus emociones de cabeza.

La castaña había intentado arreglar su lío mental en la soledad de la noche para no tener que afrontarlo en su casa, pero ya era demasiado tarde, Momo iba a cuestionar todos los detalles, y si Daniel corrió de boca suelta con ella, era el fin de la poca paz que le quedaba.

Minatosaki camino apresurada hasta su casa, estaba a solo unas calles más, por lo que fingir que no escuchaba los constantes llamados de su amiga fue muy fácil, sin embargo, apenas tuvo un pie dentro, la voz de Hirai se hizo más fuerte.

- ¡Sana! - Momo corrió hasta su amiga para tomarla del brazo, sin pensar que, está se jalaría de inmediato para verla con brillante odio en sus ojos.

La castaña tomó una gran respiración, no debía perder el control, su amiga no tenía la culpa de lo que ella sentía ni de las mentiras que decía, todo lo había decidido por sí sola a sabiendas de las posibles consecuencias, y era momento de enfrentarse a estas, aunque fueran a quebrar su corazón.

- Sal de mi habitación - pidió la menor conteniendo el malestar muy dentro de ella.

Momo negó con la cabeza en una acción que le arrebató la lucidez. Sana se veía tan tranquila, como si no estuviera a punto de quedar bajo toda esa avalancha de verdades a medias, como si lo que Daniel le había dicho a ella fuera mentira, pero Hirai la conocía bien, y sabía que los sentimientos de Minatosaki se debilitaron apenas vio a Jihyo sentada en la acera, esperándola paciente frente a su perfumería.

La mayor no quería eso, su meta era evitar que su mejor amiga terminará destrozada, e iba a abrirle los ojos aunque la perdiera para siempre, porque sabía muy bien que ese sería el precio de su dolorosa verdad.

La amante de mi esposo (SaHyo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora