𝗥𝗼𝘀𝗲𝘀| 𝐷𝑜́𝑛𝑑𝑒 𝑒𝑙 𝑎𝑚𝑜𝑟 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 𝑠𝑒𝑟 𝑢𝑛𝑎 𝑟𝑜𝑠𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑒𝑠𝑝𝑖𝑛𝑎𝑠 𝑝𝑢𝑛𝑡𝑖𝑎𝑔𝑢𝑑𝑎𝑠 𝑑𝑖𝑓𝑖́𝑐𝑖𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑞𝑢𝑖𝑡𝑎𝑟
El amor es una rosa. Se inicia con la semilla, se planta y se cuida con agua, sol y amor, está...
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Sinopsis: ¡Bienvenidos!
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¿ESTAMOS DE ACUERDO QUE LAS ESPINAS DE LAS ROSAS DUELEN?, tal vez muchos —casi nadie— no saben lo que se siente el dolor punzante en la mano por querer arrancar una rosa, porque si queremos rosas vamos a la florería y nos dan la rosa sin espinas, nos ahorraron la molestia de lastimarnos.
Pero ahora no hablo de rosas.
Hablo del amor representado en una rosa. Se planta la semilla en un suelo fértil, se riega, se asegura de que le dé sol y la cuida todos los días, sin olvidarse de ella hasta que finalmente una bella rosa a crecido, pero no porque creció signifique que dejes de cuidarla. Si tienes suerte, con el tiempo ya no solo será una sola rosa, será todo un campo completo de completa hermosura y olor exquisito, aunque eso depende del jardinero encargado.
Más sin embargo, si arrancas la rosa con total brusquedad, las espinas se encajan de inmediato y de manera dolorosa en tu mano, lloraras, suplicaras que el dolor se detenga y muy posiblemente gritaras del dolor en tu mano, si tienes una capacidad de reacción rápida, soltarás la rosa y si no, no te quedará más remedio que aguantar el dolor hasta que sueltes la rosa.
Sacarás cada espina con cuidado y a tu tiempo, procurando que cuando la saques te duela lo menos posible...pero al final, quedan las cicatrices.
Cómo dije...no hablo de rosas.
Ahora te pregunto a ti, querida Rosa...
¿Estás bien? ¿Tienes muchas cicatrices? ¿El jardinero hizo bien su trabajo? ¿Lograste crecer? ¿Lograste sanar? ¿Lograste dejar ir? ¿Lograste crear espinas a tu alrededor que te protejan más? ¿O lograste amar?
Me gustaría escuchar tu respuesta bella Rosa....
Tal vez así sepa por fin...
Que hacer con mi Rosa, la cual parece que fue plantada...en un campo infértil para la vida. O tal vez...ni siquiera se planto.
Aún así... No puedo odiar al jardinero por más que lo intenté, ya que al parecer, sus rosas fueron exterminadas por una plaga y ahora odia las rosas o más bien, teme perder más.
Ayudame rosa, ¿Qué hago? Mi mente dice que me proteja con una enredadera de espinas a mi alrededor, pero mi corazón me dice inténtalo una vez más.
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