Capítulo 12

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2 días después

‹Se acerca y siempre está al acecho, buscándo víctimas o salvando vidas. ¿Realmente es tan mala?›

Sus manos divagaban por el cuerpo ajeno que le acompañaba a la mitad de la noche, su labios se curvaban hacia arriba y sus narices jugaban y chocaban entre sí, sus pupilas se dilataron hasta más no poder adoptando un toque tierno y profundo a estos mismos mientras sus mejillas adoptaban un color carmín cuando comenzaban con ese lento vaivén que a ambos los volvían locos al unir sus labios en un tierno beso...

Se estaban entregando completamente, porque ya se habían entregado en alma desde el momento en que se vieron y prometieron estar juntos por siempre...

Pero en ese momento se estaban entregando carnalmente...

De una forma Lenta y minuciosamente perfecta...

La luz de la luna se colaba por la ventana de cristal que daba hacia aquella escena digna de ser capturada y ser prohibida a todos aquellos que no sean perfectos, o más bien también dignos de verla...

Era la luna la única testigo de aquel encuentro mágico y único entre dos seres que se amaban de forma irónica y malditamente magnífica...

—Te amo...

Comenzó diciendo en un susurro apenas audible, pero completamente oíble para el contrario, los belfos del más bajo posaron y saborearon la tersa piel de su amada, sintiendo entre sus abultados labios el salado sudor que escurría de la nuca de éste mismo, gozando de la escencia natural que él poseía en ese momento y que al mismo tiempo lo embriagaba, lo embriagaba tan jodidamente bien...

El cuerpo del castaño dió un último empuje que hizo rebalsar el vaso y haciendo explotar poco a poco la escencia de sus cuerpos, dado por terminada así, la prueba viva del amor que se compartían mutuamente...

Ahora sí, eran uno sólo, eran sólo un alma, solo una mente, sólo un cuerpo que nació de la unión de dos seres y corazónes que reclamaban y proclamaban ser unidos hasta el final de todos los tiempos...

Entre besos y caricias comenzaron a vestirse el uno al otro con sus delgadas pijamas, mientras se acomodában sobre la cómoda cama para tomar las suaves cobijas de seda entre sus manos, subiendo ésta por sus cuerpos cálidos y delgados que se sentian ya cansados y exhaustos...

Comenzando a cerrar sus ojos, guió sus fornidas manos a la delicada cintura de la contrario enredándola así entre sus extremidades en un profundo y cálido abrazo, que hizo estremecer al más bajo en un pequeño pero tierno temblor, antes de por fin caer, a los brazos del tan amado dios... Morfeo.

[Pero ten cuidado, que no todo lo bueno dura para siempre...]

Sus ojos se abrieron abruptamente debido a la intranquilidad que sintió en ese momento y al darse cuenta, comenzó a asimilar lo que su oscura mirada encontró al despertar En la habitación...

Estaba ella, un castaña...

Una chica de hebras castañas...

Y un ser que era cubierto por una capucha negra que no mostraba nada más que su espalda...

—Suerte chico... Ella no quería dejarte pero no tenía opción...

Dijo esto con una muy fría y profunda voz que heladó el cuerpo y huesos del castaño mientras esa silueta misteriosa y extremadamente delgada comenzaba a darse vuelta revelando así su rostro...

O más bien los huesos de éste....

»He tenido que llevárlo conmigo... Lo siento mucho...

Y se dió cuenta...

—Fue un gusto conocerte amigo mío, volveré por tí cuando sea el momento, yo soy...

Que era alguien a quien todos le tememos...

»La muerte...

De alguna extraña forma, no pudo moverse ni decir nada, pero a nada más ver que aquella silueta huesuda salía de la habitación con su amada en brazos comenzó a correr desenfrenadamente por el extenso pasillo chocando con quien sabe qué en todo el camino y hubiera seguido así, si no hubiera sido por el escalofrió que le provocó aquel susurro...

— Te amaré por siempre, incluso después de la muerte...

»Fue bueno verte y sentirte por lo menos una última vez...

»Mi Aidan...

Y entonces recordó. Junto con un temblor y punzada al corazón, que su amada, estaba muerta...

—¡¡_____!!

Amor ɑ mediɑs || Aidɑn GɑllɑgherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora