Si todo parecía tan irreal, era la primera vez que Ana me miraba a mi y no a Yoel... me sonreía de la manera más bonita posible, me sentía soñado, por que esta vez me miraba a mi...
Raul era como cualquier otro chico que estudiaba una ingeniería en la universidad, se juntaba con un grupo de chicos que para otros era el más importante y popular. Todos les temían, todos les respetaban, todas querian ser vistas por aquel grupo que irracionalmente se creian con el poder de tener a cada chica que se les pusiera enfrente y desecharla después... se sentían orgullos de ello, pero siempre había alguien que nadaba contra marea y si ese era Raul, quien creía todavía en el amor y en la fidelidad.
Raul siempre fue un chico muy reservado nadie sabía de sus pensamientos, ¿era guapo? Claro que lo era... su único fallo... su debilidad... y dese ahora su peor pesadilla... era Ana.
Ana era una chica que llamaba la atención de cualquier tipo... era de verdad una belleza andante, sabia que dentro del grupo de chicos populares había alguien a quien le llamaba la atención pero nunca presto interés a ello, ya que su atención era toda para Yoel... por que moría por el y moría por ser su mundo entero.
Sentada en aquel comedor Ana esperaba impactante a su mejor amiga Lía, quien le tenía información de aquel chico que sería utilizado para acercarse a Yoel... si por que su plan no debía fallar tenía memorizado todos los pasos a seguir...
1. Tener toda la informacion de aquel chico
2. Hacerle creer que eran amigos
3. Sacar toda la información necesaria de Yoel para poder acercarse y poder estar juntos
4. Deshacerse del chico que para ella parecía un acosadorSi era cruel... pero en su mente sonaba sencillo y práctico, no teniendo en cuenta que aquel chico que pensaba utilizar podría dar su vida por ella... deshaciéndose así mismo por verla sonreír y que fuera feliz.