Atrapando a Romeo

9. Llevar a Casa

El fin de semana llegó y yo no pude estar mas agradecida. Mi semana había ido de lo peor y solo quería dormir por horas, y olvidarme de la semana que esperaba por mi.

Llame dos veces a Fred por la mañana y luego otra por la tarde, para invitarlo a venir. Pero el estaba en una cita con Sophie, la cual me invitaron a ir. Me senti mal de inmediato por interrumpir, y no quería estar ahí. Así que me negué.

Mickey estaba haciendo demasiado ruido con su juego de Xbox en su habitación y papá charlaba con telefono con su madre.

Me quede en mi habitación después de la comida, y leí el guion que me habían entregado las chicas del club de teatro. Tendría que elegir un papel para la audición del martes, y aun no sabia cual.

Mi plan indicaba seleccionar un papel de sirviente o de alguien que solo dijera dos o tres palabras. Pensé en la mucama de Julieta o en un extra 4 que abria las puertas en el baile del segundo acto.

Pero decía cosas extrañas, con voces extrañas que no tenia. Y que no queria fingir.

Oh dios, solo podía imaginarme lo vergonzoso de todo esto. La única buena parte era que nadie estaría ahí, solo algunas personas que con suerte, olvidarian el ridículo de mi acto, en unos días.

El timbre de la casa soñó tres veces y espere a que mi padre abriera. Pero luego volvió a sonar y supuse que era papá y que había salido en algún momento sin avisar.

Me puse los zapatos y baje los escalones hacia el primer piso para abrir la puerta.

Andrew levanto la mano en modo de saludo con una sonrisa demasiado grande en la cara, lo mire con disgusto y cerré la puerta en su cara.

O eso intenté, ya que su pie quedo atrapado en el impacto y entro sin mi consentimiento. 

—Siempre tan amable—dijo. Mientras cerraba la puerta detrás suyo.

—¿Qué?—pregunte, porque era mi fin de semana libre y el estaba molestandome, como si la semana anterior no fuera suficiente. 

No respondió, solo dejo su abrigo y lo colgó en un gancho junto a la puerta, al parecer había comenzado a llover y no yo no estaba enterada. 

Dejo todo en su lugar sacudio sus jeans y miro alrededor, sonrió maliciosamente y adopto una posición de ataque, lo imite. Era tan extraño, que solo lo hice para evitar que hiciera algo.

Corrió para la derecha y subio las escaleras muy rápido, que no pude detenerlo. Escuche el sonido de mi puerta golpeando el otro lado de la pared. Y gemí.  El estaba en mi habitación, que molestia.

—Bájate de ahi—dije, en cuanto llegue a la puerta y lo vi completamente echado en mi cama mirando al techo.

Obedeció y casi me complace descubrir que despues de todo no era tan sucio. Hasta que palmeo el costado de la cama y encontró el guion del club de teatro. Abrió los ojos y me miró con una sonrisa burlona.

—Vaya—dijo y hojeo la primera hoja—. Romeo y Julieta.

Intente quitárselo pero el lo aparto rápidamente y se puso de pie, tome su lugar en la cama y lo ignore, era mejor no hacerle caso, porque eso solo lo emocionaba mas.

Tenia años lidiando con el, en cada fecha importante 

—El trágico romance—siguio mientras leia el guion y caminaba por la habitacion —. ¿No duró solo 7 días?—pregunto a nadie en específico —  No espera. Fueron..—contó con sus dedos—. ¿3? Se casaron al segundo día, y luego el mato a un hombre. Luego huyo no se volvieron a ver después de eso ¿o si?

—Creo que lo desterraron—dije, y el abrió los ojos grandes y se acerco a mi—. ¿Qué?— pregunté antes de que se acercara demasiado.

—No sabia que podias leer Shakespeare —dijo, y dejo el guion en la cama, se giro hacia el escritorio desordenando todo.

—¿Qué haces aquí?—pregunte, intentando no caer en su juego de hacerme enojar—. Es mi dia tranquilo y viniste a arruinarlo.

—Siempre dices eso—dijo, sin darse la vuelta—. Esas palabras lastiman los sentimientos de los demas.

Se giró y en serio parecia triste. Pero ¿que? Este no era el mismo chico que vendió mi tortuga un verano a 3 dolares, o el que corto la soga de mi columpio en la casa de verano de sus padres.

Incluso Andrew hace menos de 1 año, me dejo esperando en casa, cuando prometió llevarme a la feria nacional.

—¿En serio?—pregunté, pero el era un idiota.

Por eso cuando vio mi cara de culpa, y cuando comenzaba a acercarme a el para pedirle disculpas, porque era horrible que alguien te hiciera sentir menos, rió.

A carcajadas, que resonaron en toda la habitación. Lágrimas salian de sus ojos y se sentó en mi escritorio tocandose el estomago adolorido.

—Sal de aqui—dije, cuando se calmo lo suficiente para que me escuchara—. Vete. Ahora.

Estaba enojada, y el estaba burlándose de mi, de nuevo. Era detestable y me hizo sentir estúpida.

—Vamos Jane —respondió y se acomodó en su lugar—. Solo es una broma. Y no estoy aquí para molestarte. Aunque eso me encantaria.

No me importaba, quería que se largará y me dejara en paz. Odiaba a Andrew Gray.

—Dije que te fueras—ordene, señalando la puerta —. No me interesa nada ahora. Vete Andrew.

—¿Ni siquiera si es sobre Josh? —pregunto.

Joder. Eso si me interesaba. Y el lo sabia. Demonios.

—¿Y que hay con el?—pregunte, evitando sonrojarme demasiado.

—Bueno, le sugerí que ayudara en el club de teatro—dijo, con una sonrisa—. En serio yo estoy haciendo todo y tu no haz logrado nada.

—¡¿Qué?!—grité y el retrocedió cuando camine hacia el—. ¿Porqué hiciste eso?

No. No. No. Se suponía que nadie me veria hacer el ridículo. Oh dios. No ahora Josh estaría ahí y solo veria mi humillación.

—Es un buena idea—dijo lentamente, mientras yo e ahogaba en la miseria —. Podrás pasar mas tiempo con el. Y..

—¡No!—le grite y lo empuje del pecho—. No Andrew. El no puedo verme ahí. ¡No!

—¿Porque?—preguntó, pero ay el tenia que saberlo.

—Te odio —dije, y el no se lo tomó nada en serio. Por supuesto, yo se lo decía todo el tiempo—. ¿Porque crees Andrew?  El estará ahí. Eso significa que me vera hacer el ridículo, y eso es todo lo contrario al plan. ¿Estará en la auidición? ¿No que estaba en el equipo de Atletismo? ¿Porque esta pasando esto?—lo mire con furia—. ¡Que fue lo que hiciste!

—Bueno—dijo lentamente, mientras se alejaba de mi y caminaba hacia la cama—. Christy necesitaba donaciones. Y Josh es miembro del consejo estudiantil tambien. Así que le sugerí que asistiera en sus ratos libres. Y porque obviamente quiero que Christine me agradezca por eso.

—Haces esto por ti—dije—. Wow Andrew. Eres increíble, no te importa nada mas que tu.

—¿Porque te molesta?. Esto te beneficia. Y ganamos los dos—pensó —. Y de hecho. Estoy haciendo todo yo solo. Ni siquiera sé porque pedí tu ayuda

Suspire. Esto no me gustaba. Era malo. Y pensándolo bien, no quería estar ahí. Incluso si eso significaba pasar más tiempo con Josh. No cuando solo estaría haciendo el ridículo.

—Tienes razon—dije—. Soy una vergüenza para tu plan. Y dejare de estorbar. Lo siento.

El no se lo creyó. Fingí que lo sentía y que estaba muy apenada por no ser de utilidad. Pero el rió.

—Oh no—dijo—. No. No Jane. No te salvarás de esto.—se sentó en la cama y estiro las piernas—. Aun si eres tan mala. Todavía debes cumplir con tu parte. No puedo hacer todo yo, una vez comience a entrenar para la competencia regional. Christine será cosa tuya. Y tendrá que salir conmigo, porque yo ya te lleve a Josh a casa. Será tu turno ahora. —me miro fijamente—. Y no puedes fallar.