NOS-Özil x Ramos-

06

"Estoy tan perdido en tí que no puedo buscar a alguien más si pienso en tus ojos."

🎶Gilded Lily (Cults).

Sergio volvió a casa, viendo como al entrar Pilar lo miraba desde el cuarto, nunca había sido una mujer sumisa ni nada de eso y estaba bastante conciente de sus vicios y problemas con el alcohol.

-Hola...-La mujer se paró del sofá en dónde estaba, viendolo a los ojos mientras intentaba decifrar de quién era el olor esta vez.

No dijo nada, simplemente le sonrió irónica.
Suspiró, sintiendo como su enojo le carcomía la cabeza. Tantos años de matrimonio para que apareciera con chupetones en el cuello luego de estar toda una noche afuera de casa.

-Pili...amor, yo.-Intentó terminar la frase, pero antes que nada, sintió una fuerte cachetada en su rostro. No dijo ni hizo nada, sabía que la más joven estaba conciente de cuando hacía algo malo y ya había perdonado varias veces sus errores.

-Dijiste que volverías anoche. Y no volviste, ¿Dónde mierda te metiste?- Lo único que necesitaba era que Ramos no le mintiera, que le mirara a los ojos y le dijera la verdad.-Hueles a alcohol y tienes chupones en el cuello, ¡¿Crees que soy idiota y que no me doy cuenta?!-

Estaba furiosa, y Sergio solo se dignaba a mirarla con esas ojeras y esos ojos decaídos y muertos.

-Por favor...es que yo.- Intentaba formular las palabras para decirle, pero no podía simplemente decirle a su esposa que le gustaba acostarse con un hombre y que ese era aquel con el que tuvo rumores hace casi una década. No podía decirle "me cogí a Mesut, ese que era mi amigo hace ocho años y al que vendieron a otro club por mi culpa." Ya se sentía mal, y ahora esto era mucho peor.

-Quítate la remera.-Volvio a exigir la mujer.

Sergio la miró pidiéndole piedad, pero al ver que seguía igual, simplemente decidió rendirse y se despojó de la prenda. Viendo como la mujer lo volteaba, empezó a lagrimear sin darse cuenta, todos esos años en los que no pudo ni llorar por la tristeza de perderlo todo estaban cayendo como una manzana de un árbol.

Pilar sonrió irónica, porque le dolía pensar que aquella perra había marcado a su esposo y él se había dejado.

-¿Así que te marca y todo, eh?-

-N-no es lo que tú crees, o bueno, si. Pero no es como lo crees, Pili.-
Se sentía como un niño intentando explicar porqué había dibujado las paredes. Mesut lo había dejado, y ahora Pilar se llevaría a los niños y se iría de la casa como hace años, cuando la había engañado con una chica en una fiesta.

-¿No es como lo creo? Venga, Sergio. Eres un crío, déjame en paz. ¡Ni siquiera es la puta primera vez!-

Levantó su mano, haciendo una seña de cansancio. Sergio intentó agarrar su otra mano, pero la quito rápidamente.

-Ni siquiera me digno en irme porque tenemos hijos y no quiero volver a explicarles que su papá se metió con otra persona.- Siguió mirándolo deseocipnada.-No pensaste en todo lo que pasamos, ¿verdad? Cuando te follabas a esa zorra, no lo pensaste.-

-No fue con una zorra...-Varias veces había ido con prostitutas cuando volvía a recaer en la droga. Pero está vez era diferente porque el engaño no era carnal, si no que era sentimental.

-¿Ah, no? ¿Entonces con quién?-

Sergio cerró sus ojos, aún mirando al suelo.

-Fue...c-con alguien del pasado.- A decir verdad, no le dolía haber engañado a Pilar, si no haberla lastimado, porque sabía que tan buena persona era y como siempre intento cuidarlo. Le perdonaba todo, incluso varias veces le perdonaba amoríos con sus amigas o cosas así. Nunca había podido hacerlo exclusivo, a no ser hace unos meses dónde estaba totalmente limpio.

-¿Con quien? ¿Con tu ex novia? -

Volvió a mirarla, suplicante de comprensión.

-No...-

-¿¡Entonces con quién fue, Ramos?! - Gritó, estaba fuiriosa y desesperada por saber la verdad.

Sergio se paralizó, no sabía que haría ahora y la situación le superaba. Él no quería perderlo todo. Solo quería volver al pasado y nunca ilusionar a Pilar con cuentos de hadas.

Al ver que Sergio no respondía, entendió que no quería decirle. Solo suspiró, intentando no quebrarse en llanto, ella amaba tanto a Sergio, tanto como nunca había amado a otra persona. Era bueno, era listo, atento, amoroso, extrovertido, amable, interesante y gracioso.
La primera vez le dolió mucho, lloró noches enteras y volvió a él porque pensaba o tenía la mínima esperanza de que todo fuera por las drogas.
¿Pero ahora? Ahora estaba sobrio, limpio y se había hecho todo un padre de familia. Y volvía a caer en ese pozo de mentiras.

Vió a la más baja salir de la habitación intentando retener sus lágrimas. Suspiró pesado, no podía ir a buscarla a la cocina, ni podía esperar que le perdonara.
Solo dejó las lágrimas caer y se recostó en la pared, sentándose en el suelo mientras tiraba la cabeza para atrás.

"No voy a dejarlo todo por ti".

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-¿Mesut?- Dijo aquella chica de pelo rubio mientras salía de la habitación, había terminado de dormir a su hija y estaba pensando en ir a comer con sus amigas cuando el mayor llegara.

Escuchó los ruidos de la llave caer en la mesa, y se dirigió a la sala.

-Buenos días...¿Estás bien?- Lo vió decaído, con los ojos tristes.

Mesut rapidamente la abrazó, recostando su cabeza en su cuello.
Correspondió, sintiéndose extrañada pero apreciando a la vez el tacto ajeno.

Hasta que sintió a Özil llorar.

-A-amor...¿Estás bien? ¿Que a pasado?-
Seguían abrazados, y el otro no parecía querer soltarla nunca.
Su voz era dulce, todo de ella era dulce.

Mesut no respondió, siguió con el tacto. Ella era tan buena y se merecía el mundo entero.

-L-lo siento...Lo siento, de verdad. F-fue un día largo-Su voz se cortó, seguía siendo un mar de llanto.

Lo miró, agarrando su cara entre sus manos y acariciándola.

-Todo va a estar bien, amor.-

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Pa que lloren:) los tkm