Murata el loco de los gatos [SaneGiyuu]

O 6|Nada

Al despertar estiró sus brazos en su cama, sintiendolos vacios, ah verdad, su minino de ojos azules estaba en revisión por su salud.

Con pereza abrió los ojos confirmando su ausencia, después agarró su celular y vio borroso la hora, al enfocar su mirada correctamente entonces se dio cuenta que ya era el momento de alimentar a su gatito cascarrabias de Sanemi.

Lentamente se descubrió de las sábanas para ir al baño, lavarse los dientes y la cara preguntándose qué le daría de comer, pollito o carne, ¿quizá ambas?, No pensaba bien adormilado.

Después de todo Giyuu se queda con el salmón, ese curioso gato no comía nada más para variar, que conveniente. Que astuto, cada que le daba algo distinto olía el plato y giraba la cabeza en otra dirección, y cuando le regañaba por ser caprichoso el gato se aferraba a su pierna y le maullaba, mirando esos lindos ojos azules caía ante sus encantos perfectamente, y se sentía débil al caer.

Entonces cuando salió del baño con una toalla restregada por la cara fue a la zona donde se supone que estaría Sanemi, durmiendo, jugando o quién sabe que.

Aparto la toalla y no lo vio, curioso paso a la sala de estar y tampoco estaba ahí, no era posible que se hubiera escapado de todos modos.

¿Oh si?.

Empezando a asustarse reviso la cocina y ventanas, no las había abierto como para escaparse por ahí y saltar hacia el vacío del edificio.

¿Entonces dónde?

Fue al baño, a su oficina y nada.

Ahí fue donde se le prendió el foco.

A prisa fue a su habitación y lo encontró ahí acostado en el desorden de su cama, rasgando la almohada donde Giyuu dormía acurrucado,¿sentía algo de Giyuu ahí?; Normalmente Giyuu se la pasaba aveces lamiéndose sin dejar olor, pero, Si ese era el caso tenía sentído.

Sanemi al sentir su presencia se levantó rápido, lo miro y le gruñó, lo típico de ahora en adelante quizá, iba a evitar esto.

Se relajó al menos, al saber que no había escapado para ir con el otro minino que no se encontraría cerca del edificio.

Ya relajado fue a la cocina directamente a la alacena donde tendría su comida, agarró el paquete,se le ocurriría hacerlo jugar considerando una distancia prudente para que no lo arañe y quizá con eso le dejé acercarse poco a poco, después de todo tenían bastantes días para agarrar aunque sea una pizca de confianza, ya con eso en mente la comida lo sirvió en su plato, para dejarlo en su zona e ir a por Sanemi otra ves.

Se encamino a la habitación para no encontrarlo ahí, ¿Que era esto?, ¿Las escondidas?.

Levantó las sábanas con cuidado y nada, debajo de la cama y nada ,en los muebles tampoco, de pronto escuchó un maullido.

Proveniente de la cocina fue inmediatamente.

━━¿¡Sanemi que haces ahí!?.━━se altero al ver al felino de una altura considerable.━━¡Te harás daño baja de ahí!.

Sanemi travieso xd.