AGAIN

Herederos.

No podía, no debía.


¿Es que Sizhui lo creía estúpido acaso?

¿Eso no iba en contra de las reglas Lan? ¿Algo sobre no subestimar y pensar estúpidos a tus amigos? Quizá no existía esa regla, pero Jin Ling se aseguraría de que Lan QiRen la hiciera escribir después.

Recapitulando.

Ser llevados a otro tiempo, había dicho Sizhui. Ni mas ni menos.

Había una ligera línea entre la cordura que le impedía asesinar a sus amigos y la que le permitía hacerlo, y siendo sinceros, desde que Jin Ling tomó el mando oficial de Lanling Jin, esa línea era cada vez mas delgada. Así que jugar con "saltos temporales" no era la mejor manera de mantener cuerdo al omega.

¿Con quién cree Sizhui que está hablando? Seguramente JingYi y Zizhen se tragarían ese estúpido cuento, pero él no.

Ser llevados a otro tiempo no es algo que entre en "posibilidades reales" de lo que se puede o no hacer. Incluso el propio Wei Wuxian había dicho alguna vez que no era algo posible. Así que no, Jin Ling no pensaba aceptarlo tan fácilmente.

Pero...

Sin importar a cuanta gente le preguntó, el título del "Patriarca de Yiling " no fue reconocible para nadie.

¿Cómo era posible que la calamidad más grande vista no hace más de veinte años simplemente se esfumara? Como si ni hubiera existido...

Como si no hubiera pasado.

El omega trato de pensar y rezar a los dioses porque esto fuera una pesadilla y no una realidad. Es mas, si salían de este embrollo que claramente no había sido culpa de Jin Ling, iría directamente con Wei Wuxian y le diría "Felicidades anciano, tu invento funciona"

Rió, la falta de humor en el sonido funcionando como un eco desagradable.

En verdad esperaba estar soñando, quizá en un evento extraño y vívido como aquel quemador de incienso que su tío Wei les había mostrado alguna vez.

Siendo optimistas, esperaba levantarse en Yunmeng Jiang, en el antiguo cuatro de trabajo de Wei Wuxian, y de manera milagrosa descubriría que todo estaba donde debía estar. Nada más.

Pero contrario a sus esperanzas, cuando Jin Ling despertó a la mañana siguiente, lo hizo con un muy molesto Lan JingYi aferrado a él como una garrapata y en la misma posada donde habían encontrado refugio el día anterior.

Suspiró. Estaba siendo castigado por los Dioses y ni siquiera sabía cuál era la razón.

-Quítate, apestas.- Se quejó.

Sin respuesta.


Lan JingYi solo se quejó un poco en sueños y se aferró más al otro omega.

No lo podía creer, pensó Jin Ling ¿Acaso este hombre no debía levantarse a las cinco de la mañana? ¿Qué hacía dormido todavía? Y peor aún ¿Quién se creía para acostarse con toda libertad sobre Jin Ling cuando él tenía su propia cama!?

Tratando de recordar que la persona a su lado era su amigo y no podía patearlo como si no importara, el mayor de los omegas optó por únicamente empujar al Lan y sacárselo de encima.

Un sonido lastimero salió de la boca del omega menor, pero aún así no se levantó, enrolándose en si mismo tal y como lo haría un cachorro.

Molesto y sin importarle en lo mas mínimo el ruido que podía hacer, el Jin se aseo y vistió apropiadamente antes de salir de la habitación directamente hacia donde dormían sus otros amigos.

No se molestó en tocar, eran siete de la mañana, así que Sizhui debería estar más que despierto y con suerte Zizhen igual.