Melodia del amor

pequeño paraíso

Los días con Sergio eran casi perfectos, si no fuera por un pequeño inconveniente, lo que pensaban de ellos, ninguno de los padres de ambos sabían que estaban juntos, aunque Sergio en un punto le dijo que deberían darle esa noticia a ellos, pero simplemente no quería.

Las palabras de Casillas estaban en su cabeza de vez en cuando, no hacía preguntas, quería disfrutar de lo que el creía que era su pequeño paraíso en la tierra junto al español, aunque solo durara un año o lo que el tiempo quisiera. Se tomaba de las manos, aunque las miradas les siguieran y con ellas los susurros, parecía que a Sergio no le importaba nada de aquello. Y con Amine no sabía si todo estaba bien como ella decía, sabía que no, pero seguía llendo a verle, incluso más seguido que su propio novio, pero no asistía si este estaba en la heladería, era claro que no quería ver al sujeto con el que estaba el chico que le ilusionó. 

Ambos estaban sentados el patio del colegio, estaban tomados de las manos durante un buen tiempo, no se necesitaban decir nada para pasar de un buen rato juntos. Pero el español decidió abrir la boca.

- empieza a hacer un poco de frío...

- si... Casi otoño

Las brisas de aquel día eran leves, pero se podía sentir el frío, aunque fuera poco y mayormente en las mañanas cuando el sol ni siquiera se levantaba. El otoño también traía una cosa, su cumpleaños.

Los días como novios no eran muy diferentes a como lo eran antes, excepto que ahora ambos estaban malas juntos después de clases y que Sergio le esperaba fuera del trabajo para acompañarle a su casa. Eran raras las ocasiones en las que iban a casa de alguno de los dos, en su mayoría a la de Mesut, mientras que solo habían asistido a la de Sergio en un par de ocasiones por alguna que otra razón.

Se tomaban de la mano, pero no habían tenido un beso como pareja, solo aquel que empezó ese pequeño problema que tuvieron. Mesut no quería parecer un apresurado, pero lo que quería era un beso de parte del español.
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Estaban en casa del turco en uno de esos días que no tenía trabajo en la semana por una que otra razón, o se iban a hacer unas reparaciones o quizás se iba a redecorar el lugar, realmente no recordaba la razón. Ambos simplemente en la cama platicando sobre su día y viendo sus móviles, además de comer algunas cosas que compraron en el camino.

- ¿tú madre sabe de eso?

- no... No quiero

- ¿Por qué?

- no lo entendería Sergio

Eso lo sabía muy bien, no creía que se lo tomaría muy bien, aunque en algunas ocasiones le había dicho que le caía bien su “amigo", solo era eso.

- ¿Cómo estuvo tú día? ¿Y cómo va lo del dinero para tu violín?"

- bien, mucha trabajo e Iker enfermó, así que el se fue- Con respecto al tema del dinero, era poco como para comprar el violín que quería, eso le desanimaba mucho- es poco

- pobrecillo- El no era demasiado cercano al amigo de su novio, pero le agradaba bastante. Se acercó al turco y le dió un beso en la mejilla- seguro que lo vas a lograr, si necesitas algo aquí estoy, eres genial, lograrás lo que tú quieras Mesut

Se iba a quejar de lo aburrido que fue sin hablar con alguien por la ausencia de Iker, pero el pequeño beso le hizo callar- te quiero Sergio.

No pudo evitar darle un gran abrazo a su acompañante.