ESTÉRIL (SuperCorp)

Capítulo 25

Los meses pasaron y se había vuelto una tediosa rutina recibir siempre la misma respuesta por parte de Mike, él no quería firmar esa carta de divorcio, habían cedido a todas sus peticiones, había demasiado a su favor, pero ese hombre simplemente no quería hacerlo.

Hasta hoy. Una cita más entre las abogadas y Mike estaba llevándose a cabo en casa del pelinegro, llevaban varios minutos ya de haber empezado nuevamente con la negociación.

Había mucho a favor de él, Mike pensó, puesto que según las abogadas, él se quedaría con el 100% de los bienes que alguna vez compartió con Kara, no tendría que pagar ninguna manutención a su ex esposa y sobre todo sería libre de cargos por alguna vez haber tocado a Kara, él sería libre y tendría dinero, de lo contrario, si él no firmaba terminaría en la cárcel por acusaciones de violencia doméstica, esas abogadas le habían presentado pruebas del abuso que tiempo atrás había cometido contra su esposa y Mike no iba a arriesgarse, después de todo solo debía firmar y sería totalmente libre para formalizar su relación con Irma, o al menos eso creía.

Así que después de pensarlo bien él firmó, ahora estaba libre de compromisos y sobre todo había confiado en lo que aquellas mujeres le dijeron, a pesar de no haber un documento de por medio en el que prometían no demandarlo por abuso, él decidió confiar en su palabra, puesto que no había forma de firmar o de tan siquiera hacer un contrato para encubrir un delito, así que solo le quedaba confiar.

Su error más grande y la mejor noticia que Lena pudo recibir esa tarde.

"Mike firmó la carta, ahora Kara es libre" Ava informó a través de la linea telefónica una vez salieron de la casa del pelinegro.

"Muy bien, empiecen la demanda" Lena respondió con una sonrisa al saber que pronto ese hombre estaría en donde merecía pasar el resto de su vida. En la cárcel.

Y dicho esto la llamada concluyó, Ava y Sara tenían mucho trabajo por hacer y Lena por su parte debía acompañar a su Kara a una de sus últimas citas del seguimiento de su embarazo, pues la rubia, había entrado a su tercer trimestre de embarazo y muy pronto tendrían una fecha para la cesárea que traería al mundo a su pequeña hija.

Pasaron un par de minutos, Kara estaba lista para salir de casa y Lena se encontraba esperándola en la sala de estar mientras jugaba con sus dedos, estaba emocionada por darle la noticia de que su esposo finalmente había firmado el divorcio.

"Estoy lista" La rubia llegó hasta Lena sosteniendo su vientre rellenito.

"Hay una gran noticia que quiero darte" Lena se levantó del sofá acariciando los hombros de Kara y esta la miró con curiosidad invitándola a seguir. "Mike firmó el divorcio" Lena soltó con emoción.

"¡¿Qué?!" La rubia no podía creerlo.

"Eres libre, cariño" Lena la abrazó.

Y ambas sonrieron en grande al sentir las pataditas de la bebé, al parecer ella también estaba emocionada.

Así que alegres salieron del departamento de Lena con dirección al estacionamiento en busca del auto de esta y posteriormente se dirigieron a la clínica de Sam, era algo tarde así que debían darse prisa para poder llegar a la última hora del turno de Sam.

Una vez llegaron saludaron a la secretaria, quien minutos después las pasó al consultorio, y nuevamente después de un tiempo volvían con el chequeo de su rutina de seguimiento.

Todo iba bien con aquel embarazo, una niña fuerte y sana estaba creciendo en el vientre de Kara.

"Todo está excelente, Kara, lo más probable es que la próxima cita se te asigne una fecha para tu cesárea, así que si no han pensado en un nombre para su hija deberían comenzar a hacerlo" Sam animó con una sonrisa.

Y ambas chicas sonrieron ante eso, estaban ansiosas por poder finalmente conocer a su pequeña.

Un par de consejos más fueron dados por parte de Sam antes de finalmente terminar con aquella cita, y sin más, tanto Lena como Kara regresaron a casa dejando a Sam a solas en su consultorio.

Era hora de irse a casa para ella también, así que salió de su consultorio encontrándose con su secretaria organizando el escritorio antes de finalmente terminar con su jornada laboral. Normalmente esta se iba antes que Sam debido a que esta se quedaba para apagar las luces y cerrar su clínica.

"Que tengas una linda noche" Alex se despidió con la intención de salir.

Pero antes de que esta se fuera por el pasillo, Sam tomó varias bocanadas de aire juntando la valentía suficiente para detener a su secretaria.

"Alex" Sam la llamó de forma tímida saliendo a prisas de su consultorio, no sin antes haber cerrado todo.

"¿Si?" Alex volteó.

"¿Tienes algo que hacer ahora?" Sam preguntó jugando nerviosamente con sus dedos.

"No, solo iré a casa" Alex respondió con sinceridad y simpleza.

"¿Por qué no me acompañas a cenar? Puedes elegir el restaurante" Sam realmente esperaba a que Alex por fin aceptara su propuesta.

"Sam, ya te he dicho muchas veces que no soy gay". Esta le repitió de manera tranquila.

"¿Y eso que tiene que ver? Será solo una cena entre amigas" Sam insistió.

"Conozco tus intenciones" Alex respondió algo obvia.

"Ay vamos, puedes tomarlo solo como una reunión entre jefa y empleada".

"No hay nada que involucre el trabajo en eso" Alex comenzaba a sonreir ante la tierna insistencia de Sam.

"Podemos solamente hablar sobre trabajo. Alguna sugerencia que tengas para la clínica o el contrato en general".

"¿Un aumento de suelto?" La pelirroja tentó.

"Ey, tampoco te aproveches".

"¿Eso es un si?" Continuó molestando Alex.

"Ya basta" Sam se quejó.

"Vamos, debemos hablar sobre mi aumento de salario". Alex tomó la mano de Sam para guiarla hasta el estacionamiento.

"Basta, he dicho que eso no" Sam negó dejándose llevar hasta su auto por Alex.

Y Alex solo rió ante las reacciones de Sam.

Mientras tanto en la casa de Lena, estas pensaban en un posible nombre para su hija, inumerables ideas y a la vez ninguna pasaban por la mente de ambas.

Tenían una pequeña idea de un "boceto" para el nombre, le habían llamado de esa manera a la base del nombre que habían decidido.

"Hmm, Alura... ¿Lara?" Kara propuso... "No..." Ella descartó y siguió pensando.

"Larissa... ¿Isabel?..." Lena también propuso ideas.

"¿Eliza?" Kara pensó en otra posibilidad.

Y Lena casi sintió una bombilla encender en su cabeza.

"¡Lori Elizabeth Luthor-Zor-el!" Ella propuso.

"¡Sí!" Kara concordó. "Es muy lindo".

"Si que lo és".

Kara sonrió.

"Parece que a ella también le gusta" La rubia tocó su vientre al sentir el movimiento de su bebé.

Y Lena rió al tocar el vientre de su Kara, amaba esa sensación de calidez que sentía al lado de su familia.
 
  
 
 
 
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