Capítulo 13

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Kara se miraba en el espejo mientras vestía un vestido simple, el Emperador Kieran había ordenado que la bañaran y la vistieran con eso para que luego baje a comer.

"Su alteza la está esperando para comer" aviso una beta.

La omega asintió, siguió a la beta para llegar al enorme comedor, el Emperador Kieran estaba sentada en un extremo de la mesa.

"Siéntate, Kara" ordenó.

La rubia obedeció y tomo asiento en la silla que estaba a lado, miro el plantó de comida en la mesa.

Lena empezó a comer con tranquilidad mientras Kara solo observaba el plato con un rostro neutral, quería comer pero posiblemente Lena la castigaría si comía.

La alfa volteo a ver a la omega y se sorprendió que está solo mirara el plato de comida. "¿No te gusta la carne? ¿Por qué no comes?"

"Usted no me ha ordenado comer..." hablo en voz baja sin mirarla.

"Oye, no te tengo que dar permiso ni nada. Solo come, estás en los huesos" dijo.

Kara miro a la alfa. "¿Enserio puedo comer?" Lena asintió. Kara agarro los cubiertos y empezó a comer despacio.

Después de un largo rato ambas terminaron de comer, Lena se levantó de la mesa con lentitud.

"Tengo algunos asuntos que resolver, puedes explorar el lugar" habló mientras acariciaba la mejilla de la rubia". "Eres muy linda".

Kara sintió escalofríos al sentir los dedos fríos del alfa tocar su mejilla.

Sin más que decir la alfa se retiró, dejando a la omega sola. Kara se levantó de la silla, salió del lugar y comenzó a caminar los todos los pasillos.

"Luce muy triste" Murmuró Sam mientras veia a la predestinada de su amiga caminar sin rumbo por el palacio.

La omega dirigió su mirada a la alfa de cabello castaño verla, se le quedó viendo unos minutos con un rostro neutral antes de desviar la mirada y seguir caminando a pasos lentos

Sam retomo su camino, mientras su cabeza se llenaba de miles de preguntas relacionadas a la omega la principal era, ¿Por qué lucía tan triste y sin vida?

Por su parte Kara miraba el lugar con indiferencia, solo era otra cárcel lujosa. Sabía que el Emperador Kieran iba hacerle algo, no podía confiar en ella, no cuando toda la gente habla de lo despiadada que es y lo que le hace a las personas que no la respetan o cumplen con sus caprichos.

Detuvo su andar al ver la salida al jardín; siempre le gustaron las flores ¿Por qué no había flores? En el Reino de Daxam tampoco había flores.

"Sería muy lindo si hubiera flores" Murmuró antes de salir al jardín y tomar asiento en los primeros escalones, se quedó ahí sentada viendo el paisaje.

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Kara subía al carruaje con ayuda de su esposa, hoy irían a la vivienda de la que hablo su alfa para pasar su celo.

"Lee, súbete rápido" ordenó.

La alfa obedeció y subió al carruaje, tomo asiento a lado de su omega, y colocó su mano derecha en el muslo de esta por encima del vestido.

La rubia saco su cabeza por la ventana. "¡Nia, adiós! ¡Te voy a extrañar! ¡No comas muchos roles de canela sin mi!" sacudió su mano de un lado a otro en forma de despedida mientras la castaña sonreía.

"¡Tengan cuidado con el cachorro!" grito sin vergüenza, Nia se mofó al ver la expresión de la emperatriz.

Las mejillas de la rubia estaban rojas, metió su cabeza en el carruaje y se tapo con la cortina.

"Cariño, estás muy roja" se burló Lena.

"Ya cállate, tonta" ordenó con un puchero en sus labios.

Lena se sorprendió por lo dicho pero como decirle algo a tan linda omega. "De acuerdo... Me calló".

Kara se acurrucó en el cuerpo de la alfa para oler el aroma a coco y almendras que tanto le gustaba y que hoy era más fuerte.

El carruaje empezó a avanzar, la rubia cerro los ojos para dormirse, por lo que tenía entendido era un largo viaje y ella se aburría muy rápido.

"Lee, acaríciame" ordenó con voz suave.

Lena comenzó a acariciar el sedoso cabello de su esposa con delicadeza. "¿El cabello está bien o quieres que te acaricie en otra parte?"

"No importa dónde sea, solo acaríciame".

La alfa obedeció y siguió acariciando el cabello de la rubia que era adornado por un lindo broche de diamantes en forma de flor

"Te amo".

"Yo también te amo mucho, Lee".

Lena sonrió en grande al escuchar esas palabras.
 
 
 
 
 
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La Omega del Emperador Kieran (SuperCorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora