Háblame, cuentame cómo estás.
Lo que te preocupa.
Lo que te cuesta.
Lo que te da miedo.
Cuéntame lo que amas, lo que odias.
Cuéntame todo lo que necesitas contar. Estoy para escucharte.
Para sanarte de toda herida.
Para liberarte de lo que te ata.
Para romper todo eso que no te deja avanzar.
Cuando las cosas no salen como quieres.
Cuando tus días se vuelven tan pesados.
Cuando no puedes hacer nada para revertir una realidad.
Cuando te preguntas: "¿Por qué hago lo que hago?"
Cuando lo que pasa te supera y te angustia.
Cuando no te sientes bien y quieres desaparecer de todos lados.
Ahí es cuando debes darte cuenta que necesitas buscar mi voz incansablemente.
Ahí esta tu calma, ese es tu refugio.
Es mi verdad transformando tu realidad.
Entonces cuando no puedes hacer nada todo lo que necesitas es confiar en mí.
No necesitas protocolos ni reglas o requisitos. Solamente un corazón sincero dispuesto a escuchar mi voz y a recibir todo lo que yo tengo para dar.
Confía en que todo eso que tú no puedes, yo si lo puedo hacer.
-Dios
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Cartas de Dios II
SpiritualCartas de Aquel quién es la nostalgia del otoño, el abrazo cálido en invierno, el consejo, la sabiduría, el proverbio eterno, el suspiro entre las lágrimas, el sol cuando sale con fuerza, la calma de los que se cansan... quién es todo eso y más, per...
