♤ The Gay Divorcee ♤

Capítulo 21 : Padrinos y culpa

De alguna manera, Ignatius había accedido a acompañar a Harry mientras deambulaba por el callejón Diagon, enloquecido en silencio por cómo había iniciado accidentalmente un rumor de matrimonio sobre él y Orión. “Mmm, tienes razón, el color azul le da un toque extra al helado de vainilla”, dijo Ignatius desde detrás de su cono de helado. Harry miró su propio helado azul, esto se estaba convirtiendo en un hábito. Su 'parada de helado de pánico' mientras tenía un susto. ¿Que estaba haciendo? Había decidido concentrarse en evitar que Voldemort sucediera y salvar vidas de futuras muertes. Pero había cerrado el círculo y, de repente, su mayor problema era el lío en el que se estaba metiendo con Orion Black.

"¡Oh mira! Están Orión y los chicos —dijo Ignatius en voz demasiado alta señalando calle abajo hacia donde Orión acababa de salir de la tienda de mascotas con sus hijos. ¿Por qué tuvo tan mala suerte? ¿Era un cachorro labrador negro? El chico más alto estaba entusiasmado con el cachorro, Harry apostaría la varita de saúco a que era Sirius. Una pequeña parte de Harry quería reírse al verlo, la futura forma animaga de Sirius era en realidad muy similar al cachorro que estaba abrazando. Pero la mayor parte del pánico cegador de Harry ganó, y se escondió detrás del letrero de una tienda para esconderse de Orión. Harry no podía hablar con Orion y conocer a sus hijos en este momento, no cuando la compostura de Harry estaba a segundos de romperse. No sería capaz de mirar a Orión a los ojos, no cuando su cabeza estaba inmersa en las implicaciones de las decisiones imprudentes que había tomado desde que retrocedió en el tiempo. Ignatius miró a Harry confundido, "¿por qué te escondes?" preguntó. Harry hizo un ruido de impotencia.

No podía explicar exactamente por qué a Ignatius. Hasta donde todos sabían, él y Orión habían sido un 'elemento' durante mucho tiempo. No una relación falsa convertida en otra cosa, algo más, pero aun así algo muy nuevo en lo que Harry no quería cambiar el rumbo. Algo que Harry no estaba tan seguro de que debería haber comenzado, jugando con el tiempo por sus propias razones egoístas. Definitivamente acababa de sacudir el barco al insinuar que estaba interesado en las nupcias de Riddle con Malfoy para que le fuera más fácil hacer lo mismo con Orión. Y había estado tratando con todas sus fuerzas de concentrarse en detener a Voldemort en lugar de dejarse distraer por Orión. “Vamos,” suspiró Ignatius, empujando a Harry hacia la calle. “Incluso por aquí los rumores no viajan tan rápido. Orion aún no se habrá enterado de lo que sugeriste en la sala de billar”.

"Pero lo hará," susurró Harry con urgencia, su voz tensa. Realmente le vendría bien su capa de invisibilidad en este momento, desaparecer de sus problemas sonaba tan atractivo en este momento.

“No si tú le dices primero”. Ignatius razonó conduciendo a Harry por la calle hacia Orión y sus muchachos. Sus hijos que quería que Harry conociera, sus hijos, el mayor que era el futuro padrino de Harry. ¿Cómo se complicó tanto la vida de Harry? Correcto. Sí, porque el futuro apestaba.

_____________________

"¡Papá! ¡Papá! ¿Puedo tener un cachorro? preguntó Sirius, interrumpiendo las cavilaciones internas de Orion. Había llevado a sus hijos a comprar sus útiles escolares en el Callejón Diagon, con la esperanza de distraerse de saltar en la escoba más cercana y volar alrededor de Londres con un amuleto de apuntarme dirigido a Harry para que pudiera levantar al hombre y proponerle matrimonio. . Realmente no estaba funcionando, Orion estaba mirando anillos a través de la ventana de la joyería e imaginándolos en la mano de Harry.

Sus hijos, por otro lado, estaban igualmente distraídos por el escaparate de la tienda de mascotas. Orión siguió la mirada de Sirius hacia el cachorro que se exhibía en el escaparate. No se permitía la entrada de perros en Hogwarts como una mascota aceptable para los estudiantes, y Orion no creía que pudiera sobornar a un perro para que entrara en la escuela, sin importar lo rico y poderoso que fuera. Pero aún podría comprarle a su hijo un cachorro para que Sirius regrese a casa durante las vacaciones escolares. Si Sirius quisiera un cachorro, podría tener un cachorro.