Chainball Man

primer día

Denji observó con curiosidad cómo Makima explicaba sobre su organización, que mata demonios y protege a los humanos, bla, bla. De hecho, no escuchó nada de ella en absoluto, solo observó su cuerpo delgado, caderas perfectas y grandes pechos.

"Nosotros, los cazadores de demonios de la seguridad pública, tenemos muchos días libres pagados y el mejor paquete de beneficios..." Explicó, pero a Denji no le importaba, estaba pensando en su propio amor por Makima, si le gusta, deberían hacerlo. la cosa, aquí mismo, bueno no aquí, su habitación ahora mismo.

"Denji". Susurró, casi haciendo que Denji se estremeciera ante el repentino cambio de tono.

"¿Sí?" Makima le dio un par de uniformes, solo una típica camisa blanca y jeans negros. ¿Va a trabajar con computadoras? Porque no sabe cómo usar correctamente un teléfono.

“Normalmente trabajamos en uniforme, ponte esto”. Denji lo tomó, y con eso Makima dejó a Denji en el pasillo, el dueño de Woodchita miró la extraña cosa negra que se suponía que debía ponerse en el collar, pero no sabía cómo hacerlo.

Ahora, Dickji contra Tie.

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El ganador fue Tie.

Denji lo dejó desatado, nunca había tocado esta cosa, ¿cómo se supone que debe usarla? Simple, pídale a la Sra. Makima que lo use en su camisa. Él sonrió mientras imaginaba cuán suaves sus manos tocarían su cuello, ¿tocaría suavemente su pezón? ¿O ella lo lamería?

¿O la lamería? ¿Como un perro?

Denji abrió la puerta de la oficina de Makima, no solo ella lo saludó, también había una mujer con ella. Ella es tan alta como la Sra. Makima, no solo eso, sus caderas no eran anchas como las de Makima, pero sus hermosos rasgos faciales son impresionantes, a pesar de que él es un hombre de tetas.

Sobre las tetas, son un poco pequeñas.

Además, bonita espada.

"Esta es Hayakawa Akera, ella es tres años mayor que tú aquí". Makima le presentó a Akera a Denji, quien lo miró, y parecía no gustarle mucho, pero a Denji no le importa si le gusta o no, solo se preocupa por Makima.

“Por hoy, acompáñala”. Denji dejó escapar un incómodo "¿eh?", espera, ¿entonces eso significa que no podría trabajar con ella?

"¿No estoy trabajando con usted, señorita Makima?" preguntó Denji.

"Por supuesto no." Dijo Akera con frialdad, alejando a Denji de su jefe, el chico seguía gimiendo, no quería que lo arrastraran, se sentía como un perro lejos de su dueño.

"¿POR QUÉ?"

“Tú y la señorita Makima están en ligas completamente diferentes. Vamos de patrulla”. Denji jadeó, ¿tienen un sistema de clasificación? ¿Como una oficina aburrida?

"¡NO! SEÑORITA MAKIMA!!!” Denji le rogó, incluso sosteniendo el marco de la puerta para detener a Akera, y ¿qué tan fuerte es ella? Denji estaba en el bando perdedor hasta que Makima le ordenó a Akera que se detuviera, a lo que ella obedeció.

"Deberías renunciar, si te presentas mañana, te daré otra paliza". Akera lo amenazó, encendiendo un cigarrillo, Denji tosió y gimió cuando sus duras palabras lo golpearon. Denji no era idiota, no volvería a ver a Makima si renunciaba.

"¿Cuál es tu problema?" Denji no tenía preparado un párrafo de sabias palabras de Akera.

“La gente que acepta este trabajo por razones superficiales termina muerta, chico. Entre mis compañeros, el que se convirtió en cazador de demonios solo por el dinero fue asesinado por demonios, todos ellos. Los únicos que siguen vivos son aquellos que tienen una fuerte convicción”. Detuvo su discurso para exhalar los humos, Denji no podía creer que una mujer como ella pudiera tener amigos, y mucho menos atraer a un chico humilde como Denji. "Déjame adivinar, ¿te convertiste en un cazador de demonios porque tienes los ojos puestos en Makima?"