13. "Tenemos Que Escapar"

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Penny en realidad odiaba a la Encargada, odiaba cada parte de ella. Era insoportable.

Cada que dicha mujer se acercaba a Cinco notaba como coqueteaba descaradamente con el, como acomodaba su cabello, las risas falsas que siempre salian de sus labios rojos y Cinco, Cinco al parecer no notaba nada de esto, muy ocupado en su mundo y en su esposa como para prestar un poco de atención a un simple coqueteo.

Pero Penny no pasaba desapercibido nada de eso, muchas veces llego a pensar que Cinco la dejaria por alguien más linda, por una mujer sin asperger. Ella pensaba que sus pensamientos eran muy inmaduros para su edad, pero las inseguridades nunca desaparecer, no se desvanecen a cierta edad.

Asi fue durante casi tres años, una vida.

Y este dia no era diferente.

Ambos se encontraban tranquilamente resolviendo un caso que a Penny le interesaba mucho ya que tenia que ver con la Segunda Guerra Mundial, cuando de pronto escucho ese estresante sonido de los tacones de aguja de la Encargada contra el suelo, soltó un bufido.

-Aquí esta mi dúo favorito.- dijo la Encargada mientras caminaba con un exagerado movimiento de caderas hacia el escritorio de la pareja.

-¿Qué quieres?- soltó Penny sin medir la rudeza de su voz, Cinco la miro sorprendido.

-Solo venia a ver como iban con mi caso.- dijo apoyando su mano en el hombro de Cinco, acercandose a el mas de lo debido invadiendo su espacio personal. Penny arta de todo salio de la oficina para llegar a los cuartos propios que les asignaba la comisión. Cinco llego atrás de ella.

-¿Qué sucede, amor?- pregunto su esposo con el tono de voz suave que solo podia escuchar Penny, Penny y nadie más, exclusivamente ella.

-Estoy cansada de todo esto, Cinco. De la Encargada, de asesinar gente, no quiero morir aquí.- dijo con un nudo en la garganta, su esposo se preocupo ya que era demasiado dificil que Penny llorara, solo lo hacia cuando algo la abrumaba en demasia, en el tiempo que habian estado juntos solo la habia visto llorar tres veces, cuatro con esta.

-No podemos hacer nada hasta que acabe nuestro contrato, somos prisionero.

-Somos máquinas de matar, odio esto, no voy a soportar estar aquí dos años más hasta que termine el contrato.

-Lo solucionaremos.- dijo Cinco dejando un casto beso en su frente.

-Siempre dices eso.

-Y siempre lo cumplo.

-No creo que esta vez sea así.

-Lo sera.

Cinco tenía la razón, tenia un plan bajo la manga.

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Su misión de esa semana era ¿fácil? ¿Matar a Kennedy era fácil?

Se encontraban escondidos en un arbusto cerca de donde Kennedy pasaría en unos minutos, Plaza Dealey.

Cinco preparaba su arma y Penny estaba sentada en el pasto con las piernas cruzadas leyendo por tercera vez consecutiva el expediente de Kennedy, es algo que siempre hacia antes de asesinar a alguien.

Cinco miraba con detenimiento a su esposa y a su mente vino la platica que habian tenido dias anteriores. Cinco por fin habia resuelto "correctamente" la ecuación que los llevaria a 2019 con su familia, habia trabajado por esa ecuación durante cuarenta y cinco años.

-Huyamos.- dijo Cinco sin más. El puede jurar que escucho el cuello de su esposa tronar por la velocidad en que lo volteo a ver.

-¿Qué? ¿Escuche bien?

-Si, huyamos a 2019 con mi familia.

-Cinco, nos encontraran y mataran por traicionarlos y por romper el contrato. Nos encontraran en cualquier linea de tiempo. Estamos amarrados a esto.

-Podemos contra ellos, juntos.- Cinco se acercó a ella y tomo delicadamente su mano jalandola hacía el para tomarla entre brazos y abrazarla.

-¿Tienes la ecuación correcta?- susurro ella escondida en su pecho.

-Si, por fin la tengo, escapemos, por favor.

-No nos queda mucho tiempo.- contesto su esposa y Cinco se separo lentamente sin soltar su mano comenzando a formular la ecuación en su cabeza.

Formar el portal del tiempo no fue tan fácil, Cinco se estaba esforzando, se estaba desgastando mentalmente, pero lo logro. Del otro lado del portal se veia lo que parecia un patio viejo y descuidado, de una puerta salieron 5 personas, dos mujeres y tres hombres, uno de ellos avento un extintor que golpeó a Penny en el pie. Penny solto un gemido de dolor silencioso para no distraer a su esposo el cual se concentro más cuando vio salir a sus hermanos.

-Haz fuerza e intenta entrar al mismo tienpo que yo al portal.- lo hizo, se requeria de mucha fuerza para atravesarlo pero lo lograron.

De un momento a otro sintieron como caían sin cuidado en una pila de ramas secas con cinco personas viendolos con curiosidad.

Estaban en la Academia Umbrella.

-¿Soy solo yo o todos podemos ver al pequeño Número Cinco y a una niña desconocida?

¿Pequeño? ¿Niña?

O no.




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Eaaaa, nuevo cap

On my shoulder || Cinco Hargreeves Donde viven las historias. Descúbrelo ahora