Poems - [ Spreen x Karl] ⊹

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POV: SPREEN

Estaba caminando sin rumbo fijo, pero eso me ayudaba a pensar.

¿Será Karl el que me envió esas cartas? 

Recuerdo esa vez que conocí a Karl, ambos nos habíamos perdido en el bosque. Nos conocimos por pura casualidad, pasamos como una semana vagando por ahí hasta que por suerte llegamos al centro donde se reunían todos los pueblos.

La cara del híbrido se ruborizar aquel recuerdo donde Karl le había dicho "Buenas noches, mi osito", entre otras cosas más. El haberse dado cuenta de ese pensamiento liberó una cadena de preguntas y dudas respecto a sus sentimientos.

— ¡¿Qué?! No. No puede gustar Karl... — Pensó, se rehusaba a aceptar el hecho de que había desarrollado sentimientos por aquel castaño.

— Dios, sería re piola que el haya escrito el poema — Se imaginó la situación ruborizado mientras buscaba en su bolsillo la carta.

— ¿Qué mierda? No me la contés, me la olvidé en casa de Karl — Dijo suspirando. — Supongo que tengo que volver, de paso podría preguntarle — Se dió vuelta en dirección de la casa del castaño.

Durante el trayecto consideró invitarlo a algún lugar alejado, donde Quackity o alguna otra persona no intervenga... ¿Intervenir qué? Solo iban a hablar como dos amigos normales, ¿No?

Spreen al notar ese pensamiento intrusivo volvió a sonrojarse.

— Dios, ya, solo lo voy a llevar al lago, algo tranqui — Pensó intentando recuperar la compostura

Cuando al fin había llegado golpeó la puerta, esta vez siendo Karl el que había abierto.

— S-Spreen! What's happend? — Preguntó algo nervioso, el también se percató de que el pelinegro había olvidado la carta.

— Mirá, me preguntaba-... — Este se calló para empezar la oración de nuevo en inglés — C-Can you go to the lake with me? — Spreen estaba dudando si lo dijo bien, eso si, estaba seguro de que pronunció todo para la mierda.

— S-Si, me gustaría — Murmuró Karl.

Cabe aclarar que la pronunciación de ambos era tremenda pija, pero de alguna forma entre ellos se entendían. 

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y de un momento a otro se encontraban caminando, con un silencio incómodo de por medio.

— Entonces.. Why do you want venir aquí? — Preguntó Karl en un intento de romper ese silencio.

Varias veces cuando Karl hablaba con Spreen intentaba hablar mayormente español, pero a veces reemplazaba frases o palabras con el inglés.

— Ahh, eso, nada. Solo quería pasar tiempo con vos — Dijo haciéndose el desinteresado.

— Ah, emm.. Ya encontraste a esa persona? — Volvió a formular otra pregunta.

— Hoy si que estás curioso no? — Contestó con un leve sonrojo. — Vení mira —

Apenas había terminado la frase tomó de la mano a Karl mostrándole que estaban en un pequeño acantilado, y debajo de este, una hermosa laguna con algunas ranas y nenúfares.

— Tene cuidado — Dijo advirtiéndole, ese lugar era peligroso, un paso en falso y cualquiera podría resbalarse y caer al agua desde una altura considerable.

— O-Okay — Dijo para luego asomarse a ver el agua desde aquél lugar. — That's so beautiful — Dijo mirando el agua para luego dirigir su vista al pelinegro que se encontraba a su lado. — Beautiful like you — Agregó en un casi susurro.

— Q-Qu- — Spreen había caído enamorado suyo. Literalmente.

Al escuchar esto de una forma tan inesperada, por querer reaccionar rápido se resbaló y en un intento de sujetarse de algo agarró el brazo de Karl, provocando que ambos cayeran al agua. 

Por suerte no hubieron daños mayores... ¿No?

— MIERDA — Gritó Spreen luego de salir del agua — Karl?! Donde estás? ¡¿Estás bien?! — Desesperadamente empezó a buscarlo hasta que el castaño se asomó afuera del agua.

— Spreen! Are you okay?  — Dijo acercándose preocupado hacia el híbrido pelinegro — Come — Lo sujetó del brazo hacia la orilla.

— Dios, disculpame. No fué mi intención — Se lamentó Spreen pero fué interrumpido.

— Your eyes.. — Dijo Karl asombrado, el nunca lo había visto sin lentes. Bueno solo había visto sus ojos bajo aquellos oscuros lentes.

— Ah, esto... — Spreen avergonzado corrió la vista.

El padecía de heterocromía y no le gustaba que la gente viera sus ojos de diferentes colores. Era raro para el y seguro lo era para el resto. 

— Tus..ojos son bonitos — Dijo sonriendo.

— Gracias.. creo. Ar yu okay? — Preguntó en un intento de evadir el tema mientras buscaba sus lentes, que por suerte los logró encontrar.

— Si, I'm fine. Don't worry  — Dijo escurriendo su ropa.

— Creo que deberíamos ir a mi casa, con la ropa mojada podríamos enfermar- — Notó un detalle que hizo que se callara inmediatamente —  Karl, please stay... quiet? — Dijo mientras notó una pequeña ranita asomándose dentro de la capucha del suéter del castaño.

El híbrido se acercó al otro chico y agarró la pequeña rana y se la mostró — Mira — 

Karl no sabia si quedarse en shock por el hecho de haber tenido una rana tan cerca suyo o porque el pelinegro se acercó de forma inesperada a el. — Gracias — Se limitó a decir para luego darle un beso en la mejilla. — Eh, vamos a tu house! — adelanto el paso a quien sabe que dirección con tal de evitar el contacto visual con este.

— D-De nada — Respondió a base de tartamudeos, sobándose su mejilla. — E-Espera —

— Ah? — Dijo Karl volteando a ver.

— T-Tu.. eh.. — El pelinegro hizo una pausa para luego seguir hablando — M-Mi casa es por allá, estás yendo por la dirección equivocada boludo — Dijo retomando su compostura.

Rayos, Karl ya se había ilusionado. — Sorry! Yo te sigo, gatita —

— Pero no me llames así pelotudito — Dijo agarrando la mano del castaño llevándolo en la dirección de su casa. 

Karl solo se limitó a reírse.

Estuvieron un buen rato caminando, por suerte Spreen inspiraba seguridad y confianza en cada paso. Karl solo lo podía confiar en el ciegamente mientras le seguía el paso, embobado solo podía pensar en el. Karl aseguraba que la mano del pelinegro se sentía áspera y pesada pero disfrutaba agarrarla, quizás algún poema surgiría de aquel pensamiento.

Ambos debían apurar el paso, estar en un bosque con la ropa húmeda y a medio oscurecer no era buena idea.

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1030 Words