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Pensé en lo que Changbin había dicho, tal vez me había sobrepasado un poco con Bang.
Aunque estamos de acuerdo en que lo merecía.
Empacaba lo indispensable para 2 semanas aislada de la ciudad, el campamento me encantaba, había paisajes verdaderamente lindos, lo más atractivo para mi era el lugar donde nos hospedabamos, era grande, no a lo largo, a lo ancho, un espacio donde podías relajarte. Las actividades a realizar eran desde pesca hasta hacer fogatas, normalmente todo el Colegio asistía, ya que por suerte el promedio de nuestra escuela era de los más altos, rara vez habían bajas.
Porque existía esa empatía de ayudar a los demás.
Como lo hacía Soobin.
Intentó no pensar en ello, me es difícil, en cuanto más lo meditó me doy cuenta que él es una persona espléndida.
Si tan solo fuera más valiente, quizá. Cerrando mi maleta camine a mi puerta, noté a Jeongin recostado con su telefono, sonriendo.
-Quién te tiene tan sonriente?
-Hyunjin... Él. —suspiró.
-¿Tanto te gusta?
-Un día de estos lo traere aquí para que lo conozcas, de verdad él es cautivante.
Ver a Jeongin hablar tan abiertamente y contento sobre sus sentimientos me daba vergüenza, no por él, por mi, yo no podía hacer eso. La mayor parte del tiempo la vivo reprimiendo mis emociones, también podría ser que soy frívola. En cierto sentido.
-No te preocupes, ya encontrarás a alguien que te haga sentir enamorada.
-Tal vez ya lo tengo...
-¿Soobin? Puff, ¿Cómo estás tan segura que es él?
-Me siento "bien" pensando en él.
-Chaeeun, enamorarse es más que sentirse "bien" con una persona.
-Cómo se siente? —tomé asiento prestando atención.
-No es algo que pueda describir tan fácil, y en todas las personas es distinto, pero algo que te puedo asegurar es que es maravilloso.
