Dragon's Sea [Rhaenyra Targaryen]

TWENTY

La espada de Laenaera choco con la de Aerea quien cayó hacia atrás tirando a Daenaera en el proceso.

Las niñas Velaryon habían insistido en que debían aprender a controlar la espada, "Somos jinete de dragón, los jinetes de dragón tienen que saber usar la espada", tras varios días de súplica que se convirtieron en semanas, meses y finalmente en un año, Laenaera accedió a adiestrar a sus hijas en el arte de la espada. John observa a lo lejos como Aerea y Daenaera caían juntas, igual que las otras veces.

ㅡ¡Arriba!ㅡExigio Laenaera.

Aerea se incorporo rápidamente y jalo el brazo de Daenaera para levantarla, Laenaera no sé espero y volvió a chocar su espada contra la de Aerea quien tropezó nuevamente.

ㅡTal vez debería tener más tacto, miladyㅡIntervino JohnㅡAsi ellas podrán aprender lo que quiere enseñarles.

ㅡ¡No!ㅡGrito DaenaeraㅡPodremos tener el título de Ladies pero no somos débiles.

Laenaera miro rápidamente a John para después sonreírle con arrogancia, Aerea y Daenaera no eran débiles y si querían aprender a defenderse lo aprenderían tal y como debía ser, cayendo.

De joven, Laenaera había sido tranquila y prefería siempre estar en la sombra de Laenor dónde se sentía segura, tras mudarse a Braavos decidió que debía aprender a defenderse y el nacimiento de Aerea la motivo más, tres años bastaron para volver a Laenaera Velaryon diestra en el arte de la espada, arco y cualquier arma que se le pusiera enfrente, Vaemond no había sido muy partidario de que su esposa aprendiera a luchar pero ella insistió alegando que si en algún momento llegará una guerra, los dragones no estarían siempre para protegerlos.

John había sido quien estuvo a su lado en los entrenamientos, viéndola caer y levantarse con la nariz o labio ensangrentado, verla ahora entrenar a sus hijas por cuenta propia lo hacía recordar aquellos días.

La espada de Daenaera golpeó la de su madre en un intento de defender a Aerea, Laenaera levantó nuevamente la espada y ahora su golpe fue detenido por Aerea. Ambas niñas Velaryon aprendían rápido y eso hacia sentir orgullosa a su madre.

Giró sobre su lugar y de debajo de su vestido sacó una daga de madera, apuntó a Aerea con la espada y la otra hacia el cuello de Daenaera, ambas niñas se quedaron en sus lugares, estáticas, sorprendidas por el movimiento de su madre.

—Están muertas—Anunció, victoriosa.

Aerea y Daenaera sonrieron encantadas.

—Sigan ustedes.

Ambas niñas aceptaron y comenzaron a pelear entre ellas con sus espadas de madera. Laenaera camino hacia John y el castaño le sonrió apenas la notó acercarse.

—Nunca te había visto hacer ese movimiento—Felicito el Sir.

—Factor sorpresa—Laenaera sonrió.