Desastre... [parte 1]

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Con la segunda guerra mágica terminada, la aristocracia londinense se vio enfrentada a tomar una decisión: rendirse ante los ideales del bando de la luz o marcharse rápidamente de Inglaterra. Su mundo habia vuelto a cambiar drásticamente por centésima vez y los corazones de la gente son reacios a olvidar.

El Londres Mágico era un desastre de pies a cabeza, con los líderes muertos y consejos disueltos el Ministerio de Magia no era más que un chiste de gobierno, los pocos representantes políticos del bando de la Luz que sobrevivieron reconstruyeron la sede con el apoyo de varias autoridades internacionales mágicas y muggles. Con el tiempo, las relaciones externas se convirtieron en la base del sistema económico y político de Inglaterra, dónde nuevas líneas de sangre y familias se sumarían al círculo social mágico británico.

Pero las transformaciones no sé detendrían por un largo tiempo, las reformas en leyes liberaron a cientos de elfos domésticos por todo el país, las corporaciones como Gringotts se expandieron por el continente y las riquezas de casas ancestrales cómo Gaunt o Fitzgerald fueron usadas para la reconstrucción de Hogwarts, San Mungo, entre otras instituciones.

Los bandos poco a poco se habían desdibujado y nuevos grupos con ideales más inquietantes surgieron a la superficie, se hacían llamar Ouroboros, mensajeros del "antes y después" quienes tenían conocimiento extenso de artes magicas y magia ancestral, buscaban el orden y permanencia de la sociedad mágica, tanto sus métodos y organización se mantuvo en especial secretismo hasta los primeros años del milenio.

Esa fría noche de verano del 2004, cuando la tormenta más atroz conocida se extendió por casi media europa, una reunión de Ouroboros se llevó a cabo en las afueras de Cheshire para discutir los avistamientos de una enfermedad que llamaban la 'peste mágica', cuando uno de los presentes tuvo una visión que cambiaría el curso de la historia.

-¡Todos cálmense, sé que podemos encontrar una solución!- dijo Peter.

-Tú mismo lo escuchaste, sólo "aquél que una vez se enfrentó a la oscuridad y vió a los ojos a la mismísima muerte podrá cumplir con la tarea", no quedan muchas personas vivas que cumplan con los requisitos- Johanna replicó.

-También dijo que "habría de vivir dos veces", no creo que existan regresores registrados en Inglaterra, el último que se supo fue Ignotus Fitzgerald ya hace un siglo, sin decir que todos los giratiempos en el país fueron confiscados y destruidos por la Nueva Orden después de la guerra- dijo Henry, mientras una jóven morena de pelo plateado rizado y ojos violeta repasaba la transcripción de la visión y los reportes clínicos sobre el tablón.

-Sabemos que la peste tiene como objetivo atacar el sistema inmune, desestabilizando el núcleo mágico y expulsar el gen diferencial del mago. Sin embargo, el tiempo de incubación es de un ciclo lunar con síntomas leves durante las primeras fases o asintomáticos en los peores casos, imposibilitando la detección temprana de ésta- dijo la joven morena.

-Aunque supiéramos como detectarlo Marleen, no tenemos forma de curar la enfermedad y todos los infectados hasta ahora llevaban demasiado tiempo en contacto que no hay forma de como aislar el brote sin interferir con la magia restante del núcleo- expuso Johanna algo cansada de los sucesos de la noche.

-Pero si logramos conectar con un recién infectado podríamos observar de cerca la incubación del brote, tomar muestras y aislarlo justo antes de que infiltre el sistema inmune y núcleo- explicaba Marleen.

-¿Estás diciendo lo que creo? ¿quieres que intencionalmente infectemos a alguien para poder estudiarlo? ¿Es que estás demente?- Henry replicaba mientras se sostenía la cien del lado izquierdo en señal de estrés.

-Tampoco seas mojigato Henry, hemos hecho peores cosas por menos. Lo que me preocupa es cómo y a quién precisamente sabremos infectar, además ¿Qué pasará con la visión? Nunca antes hemos ignorado un mensaje de Hécate y mucho menos en una noche como ésta, todo indica que tiempos turbulentos se acercan- contestó Johanna.

-Yo tampoco creo que sea buena idea olvidar lo dicho en la visión, en especial cuando sabemos las posibles consecuencias. Por una razón nosotros existimos, debemos concentrarnos en encontrar a esta persona y conocer su papel en todo esto.- dijo Peter

-No estoy diciendo que no lo buscaremos pero si él es la clave de este problema, ¿no es evidente su rol con nosotros, el porqué nos involucra?. El vidente dijo "cuándo la marea suba y el cielo se torne negro, los cinco del circulo deberán tomar una decisión, las respuestas están en el ayer y la solución se presentará en el mañana, sólo aquél que una vez se enfrentó a la oscuridad y vió a los ojos a la mismísima muerte podrá cumplir con la tarea, cuándo llegue el momento deberá vivir dos veces, lo que no había visto con claridad fluirá y la verdad se presentará como una vieja amiga"- repitió Marleen.

-¿Quieres usar a nuestra única esperanza como conejillo de indias? No sabes siquiera si puede funcionar, los riesgos son demasiado altos y en caso de que sea posible, ¿crees que acceda a hacerlo?- cuestionó Peter.

-Podría funcionar, si él cuenta con el poder suficiente podríamos invocar un lazo de conexión de sangre, de ésa forma estaría protegido de la peste y nos ayudaría a encontrar la cura- dijo Marleen.

-He leído sobre ello, es un ritual demasiado complejo que vincula tu magia con la de tus ancestros. Quedaría sujeto a la voluntad de esa magia antigua o peor, ser rechazado y drenado de su propio núcleo- expuso Johanna.

-Pero sin el lazo los riesgos serían mucho más altos, además la visión se refería a un ritual de cinco personas, los hechizos ancestrales son los únicos que requieren tantos magos juntos- Henry dijo.

-¿Deberíamos hacerlo entonces? ¿Cómo encontraremos a alguien lo suficientemente fuerte para sobrevivir el ritual y cumpla con lo que la visión dijo?- preguntó Peter.

-Existe una forma, pero es ilegal y tiene un gran costo a largo plazo, sin duda debemos estar completamente seguros de que haremos esto, a toda costa- seriamente dijo Marleen. Todos la observaron en silencio hasta que uno a uno accedió, la decisión estaba tomada y el curso de la mayor aventura de todas estaba por dar comienzo.

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