Amor Después De La Desventura. •James×Aiden•

-¡¿Qué mierd4 paso ayer?!-

En el capítulo anterior:

Los chicos se levantaron muy cansados, con dolor de cabeza y los dos despertaron casi...¡¿Casi desnudos?! Ellos...¿Quizás?

[...]

Narrador: James.

Hoy me había levantado muy cómodo, pero a la vez muy incómodo, me dolía todo, tenía un dolor de cabeza muy fuerte, me haría estallar. Sentía que la mitad de la ropa no la tenía puesta y eso hizo que me despierte sobresaltado, apenas abrí los ojos noté que no era mi habitación y estaba semidesnudo...los cerré otra vez, era tanta mi resaca que no distinguia bien la habitación, me tape los ojos rezando que no fuera ninguna de las dos opciones de las que pensaba; podría ser que por la borrachera haya engañado a Aiden, lo cual hubiera sido lo peor que me pasó en la vida. Mi segunda suposición fue que al llegar a la casa Aiden y yo no nos hayamos controlado y...la verdad tampoco esperaba que eso sea cierto, amaba a Aiden y si fuera por mi me entregaría, pero no quería hacerlo sentir incómodo y mucho menos quería que nuestra primera vez sea gracias a una maldita borrachera.

Al abrir los ojos me lamente muchísimo, era la habitación de Aiden, ninguno de los dos traía nada arriba, no quería ver bajo las sábanas por la privacidad de Aiden pero...¿Nosotros...? ¡O sea! No lo podía confirmar, no, toque mi partes bajas y tenía algo puesto, puede ser que no haya sido así y estaba apresurandome a los hechos, así que decidí levantarme y tomar un baño caliente, me sentía sucio...eso no era muy bueno que digamos.

Termine de cepillarme los dientes luego de bañarme, pensando en cómo hablaría con Aiden cuando despertara, esos pensamientos fueron interrumpidos con el grito desesperado de Aiden en la otra habitación. Gracias a Dios no estaban sus padres.

-¡¡James!!- Gritaba muy paniquiado.

-Aiden...tranquilo ¿Sí? Sé lo que piensas y me encantaría, pero no te puedo asegurar que no sea así.

-¡¿Qué qué?! Dime que es mentira, dime, por favor dime que es mentira, no, no- Aiden se veía muy mal, me sentía como la mierda, no podía dejar que Aiden este llorando así enfrente mío, pero no sabía cómo iba a reaccionar, no quería que se sienta incómodo por algún contacto mío.

-Aiden, mi amor, tranquilo, no sabemos que paso, ve a bañarte, estoy seguro que no hicimos nada.- Eso sólo lo dije para tranquilizarlo, todo era obvio, de seguro lo habíamos hecho pero no quería ver sufrir por algo en que no estábamos del todo seguros.
Aiden fue a bañarse, cuando por fin salió, le hice un desayuno rápido y se lo dí, me senté al lado de él en la mesa, le agarre las manos y las bese.

-Aiden...mi amor, ¿calma sí? Veremos que paso, y bueno...si paso lo que creemos que paso...no podremos hacer nada...- Quizás eso no lo calmaria pero quería serle sincero.

-Es que...no quería que mi primera vez fuera así...- Dijo con un tono triste, yo lo entendía, pero sus palabras también me dolieron un poco.

-Tranquilo...- Dije calmandolo con un tono bajo en mi voz.

-No, no creas que no quería que mi primera vez fuera contigo, la verdad es que me encantaría, pero...quería que por lo menos tuviera memoria de aquello, que sea especial, no que sea por una borrachera y no acordarme de nada- Yo lo entendía, yo también quería que mi primera vez fue memorable, pero ahora recordarlo era asqueroso...y quería que él tuviera lo que yo no y mucho más eso.