Daphne Valentina Pemberton Andreotti
La princesa de dos imperios
Hija de dos de las más poderosas familias de Europa
Todos conocen a Daphne
Todos esperan grandes cosas de ella
Es la heredera, la primogénita, la princesa y como tal su destino ya fue...
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DAPHNE
"Nadie puede evitar enamorarse. Tal vez uno quiera negarlo, pero es posible que la amistad sea la forma más frecuente de amor" - (Stieg Larsson)
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Cuando llegué a casa mis padres estaban enfadados, aunque eso no me sorprendía teniendo en cuenta que desaparecí, por lo que justo ahora estaba castigada, aunque honestamente el castigo pudo haber sido mucho peor; tenía prohibido salir de casa durante la noche por dos semanas y si tenía que salir debía dar una gran explicación de a donde iba, sin embargo, no todo estaba mal porque durante los últimos días pasé las tardes en el apartamento de Mason que seguía recuperándose.
Mis padres no estaban contentos por mi escape nocturno, pero tampoco estaban furiosos, así que eso de por si era una victoria, aunque los que sí que estaban furiosos eran mis amigos que no solo creían que perdí la razón si no que estaban dispuestos a encerrarme para evitar que volviera a cometer una locura como esa.
Cuando Kayla y Justin supieron que había salido de casa a altas horas de la noche, para dirigirme hacia el mismo lugar en el que me atacaron pues enfurecieron y su reacción fue mucho peor ya que no estaba dispuesta a explicar las razones por las que fui o lo que sucedió; así que ahora no solo tenía a mis padres en estado de alerta, si no que mis amigos pasaban cada momento libre que tenían a mi lado, dispuestos a vigilarme para que no cometiera otra locura.
Mis hermanos no entendían lo que sucedía y tenían muchas preguntas que no tenía idea como responder, pero al menos ellos no me reclamaban por mis acciones, al contrario, parecían sorprendidos e incluso divertidos por lo que estaba pasando.
Durante la semana dediqué mis mañanas a todas las actividades que tenía pendientes; ya fuera ayudar en la casa hogar, encargarme de mis trabajos de la universidad o los documentos que debía revisar; me levantaba a las seis de la mañana para encargarme de todos los asuntos que requerían mi atención y por la tarde me dirigía al apartamento de Mason llevándome medicinas, comida o algo para que se entretuviera.
Mis amigos estaban en desacuerdo con que lo visitara, pero no tenían forma de impedirlo, así que simplemente se ahorraban sus comentarios y me esperaban en casa para pasar el resto de la tarde o noche conmigo, asegurándose de que estuviera bien.
Estos días con Mason fueron diferentes, no discutimos ni una sola vez, no nos peleamos ni confrontamos; simplemente la pasamos juntos, como amigos y eso fue divertido; en estos días descubrí muchas cosas sobre él que desconocía y con cada cosa nueva que aprendíamos el uno del otro, todo parecía mejorar.
Aprendí que además de ser realmente competitivo, era muy bueno en los juegos de mesa, en especial los de estrategia; aprendí que nunca antes había jugado un videojuego y que no le llamaban la atención; descubrí que tenía una voz hermosa, algo grave, pero dulce y que le gustaba cantar cuando pensaba que no lo estaba viendo.
