Dificultades

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Serena abrió sus ojos al sentir el movimiento brusco del auto, Mina había acabado golpeándose contra la ventanilla debido al movimiento. Seiya observaba al frente la barricada de autos que habían sido colocados para frenar el avance de los infectados. Golpeó lentamente el volante con sus dedos, miro a las dos chicas tratando de parecer tranquilo pero si era sincero con él mismo no tenía idea de que hacer, si seguían caminando lo más posible es que se encontrarían con los infectados y tardarían más  que en auto, quizás esa había sido la razón por la cual Taiki les había dado tantos días para llegar a la base aérea.

—Debemos regresar—sugirió Mina, la rubia miro hacia atrás comprobando que no hubiese algún infectado—: podemos tomar otra ruta.

—¿Qué haremos si está bloqueada? Hay tres rutas, está está bloqueada pero las otras dos...—Serena tomo la mano de Seiya llamando su atención.

—¿Qué pasa bombón?

—Los militares deben estar usando alguna de las otras dos rutas para patrullar, podemos intentarlo —Seiya termino por asentir, le dio una mirada a Mina y está asintió—: quizás encontremos ayuda en el camino.

—Quiero que entiendan una cosa,—ambas rubias lo miraban expectantes—: si hay sobrevivientes serán hostiles, no bajere del auto a menos que vea el tanque de combustible  en niveles críticos.

Ambas asintieron. Seiya encendió nuevamente el auto dando marcha atrás, saco su teléfono celular marcando el número de su hermano pero este no contestaba por lo que supuso debía estar ocupado con algo referente a su viaje de rescate. Serena decidió pasarse al asiento trasero con su mejor amiga, ambas estaban nerviosas por la forma tan veloz del moreno para conducir, además que a sus pies tenían un bolso lleno de algunas armas que Taiki guardaba en su clóset según palabras de Seiya.

Serena dejo que Mina se recostara en su regazo y volviera a dormir, de los tres ella era la única que podía conducir si el momento lo ameritaba y ese era el motivo para dejarla descansar. Al sentir que se dormía, nuevamente miro por la ventanilla encontrando algunos zombies corriendo hacia el auto pero no lograban alcanzarlos debido a la velocidad del mismo.

—Perderemos tiempo buscando la ruta correcta—la rubia no dijo nada al respecto preocupando de esa forma a su amigo—: te verás con Darién, te lo prometo...se que él te preocupa.

—No me preocupa, no pienso en él desde que esto inició—Seiya la observó por el retrovisor—: me preocupa que no logremos escapar.

—Bombón te prometí que saldríamos de aquí—asintió lentamente—: si pierdes tu confianza en mí me romperas el corazón, además recuerda que mi corazón vale oro no puedes dejar que se dañe.

—Eres increíble...—ambos rieron—: siento mucho lo de Yaten.

—Yo también, fue mi culpa no debí ser descuidado—la rubia negó—: debí ser yo, no él.

—No digas eso, si te hubiese pasado algo...si te hubiese perdido yo...yo...

—¿Tú que?

—Me volvería loca, no puedo imaginarme una vida donde tú no estes—Seiya sonrió ligeramente al escuchar su confesión y ver aquel sonrojo en sus mejillas, aquello  fue suficiente para darle motivos de seguir luchando.

Su teléfono celular comenzó a sonar, el nombre de Taiki fue suficiente para romper el momento que se había formado. Seiya accionó el altavoz una vez contesto.

¿Donde estan? Necesito que no pierdan tiempo y lleguen rápido a la base aérea. Haruka no podrá seguir retrasando las órdenes militares, ¿Lo entienden? Kakyuu está viajando hasta Okinawa en compañía de un equipo médico.

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