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Madison

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Madison

Tres años antes

Estábamos llegando tarde por su culpa, de nuevo. Blackthorn va a matarnos mierda.

— ¡Kevin, si no mueves tu trasero aquí en este instante me iré sin ti!

Como por arte de magia abrió su puerta.

— ¡Que malhumorada mujer!— me miró con falso enojo.— ¿No ves que ya estoy listo?— sonrió.

— Sí sí, como digas— pasé a un lado de él.— y apúrate, el tiempo apremia.

Al llegar a la agencia vimos a todo el equipo reunido, esperándonos.

— En mi defensa, a alguien se le pegaron las sábanas— me excuso levantando las manos.

— Lo siento señor— dice sin importarle mucho en realidad.

— Hablaremos de esto luego— nos mira serio.— pero ahora tenemos algo más importante que hacer.

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Señala un lugar en el mapa extendido en la mesa.

— Esta, es la vieja mansión Ross, sus dueños nos necesitan para echar a un visitante tipo uno— nos mira y con un asentimiento de cabeza acatamos la orden.

Hoy está más raro que de costumbre, lo oculta muy bien, pero para una canalizadora como yo, es evidente que algo le pasa, su aura está pesada, traté de concentrarme para saber lo que le pasaba, pero me descubrió mirándolo.

Comenzamos a preparar los bolsos con todo lo que podríamos necesitar, busqué a Kevin con la mirada, pero no lo vi por ningún lado.

Tomé mi espada y la coloqué en la vaina que colgaba en mi cadera, tomé mi bolso y lo cargué en mi hombro. Esperaré afuera hasta que todos estén listos.

Entonces tocan mi hombro.

— Madi, no te muevas, solo escucha atentamente— que susto me dio este idiota, ¿Dónde se había metido? Y ¿Por qué suena tan serio?— no puedes ir con nosotros esta vez, creo que deberías quedarte— ¿Quedarme? Está alucinando si cree que voy a hacer eso.

Comenzó a inundarme una preocupación abismal y sentí miedo, pero esas emociones no eran mías. Eran de él.

— Oye, solo porque seas el favorito del jefe no te da derecho a dar órdenes— solté molesta, pero aun así no me dejó moverme ni un milímetro.

— Te lo estoy diciendo en serio Mad, acabo...— respiró profundamente.— acabo de hablar con Jack, él escuchó todo. Este visitante, no es meramente parecido en nada a lo que nos hemos enfrentado anteriormente, y él, él no cree que regresaremos vivos.

𝑱𝑼𝑺𝑻 𝑶𝑵𝑬 𝑪𝑯𝑨𝑵𝑪𝑬  ||  𝑨𝒏𝒕𝒉𝒐𝒏𝒚 𝑳𝒐𝒄𝒌𝒘𝒐𝒐𝒅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora