𝑴𝑨𝑫𝑰𝑺𝑶𝑵 no tiene nada que perder, así que decide cambiar su vida.
Así es como se encuentra con una amable castaña, quien la llevará a conocer la familia que nunca tuvo.
𝐀𝐧𝐭𝐡𝐨𝐧𝐲 𝐋𝐨𝐜𝐤𝐰𝐨𝐨𝐝 𝐱 𝐟𝐞𝐦𝐚𝐥𝐞 𝐨𝐜
𝐋𝐨𝐜𝐤𝐰𝐨𝐨𝐝 𝐲...
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Madison
Al cruzar esa puerta, la imagen de mi madre desapareció.
Todo se oscureció y los sonidos se fueron apagando, mis sentidos estaban alertas. Pero mi corazón le ganaba a la razón, me faltaba el aire y mi corazón se apretujaba dolorosamente.
— ¿Mamá?— mi voz se perdía en la oscuridad, hasta que sentí como tocaron mi hombro.— ¿Qué...?— no pude continuar, ya que una mano se posó en mi boca, impidiéndome hablar.
— Escucha claramente Madison, no me conoces, pero soy la guardiana de tu madre— Es Lisa. ¿Qué hace aquí?— supongo que tú ya conociste al tuyo ¿No? Turak— yo solo pude asentir.— Sé que no es el momento, pero ten cuidado, hay cosas horribles en este mundo y te están buscando.
Cuando aflojó su agarre pude hablar— ¿Quién me está buscando? ¿Dónde está mi madre?, o ¿Qué carajos está pasando?— largué todo lo que pude antes de que me callara nuevamente.
— Personas poderosas, que quieren tu don. Necesitarás ayuda, no podrás luchar sola— En ese momento sentí los pensamientos de los chicos detrás de la puerta.
— ¡Mis amigos me necesitan!
— ¡Madison tu madre está viva!
En ese momento me quedé helada, eso no era cierto, no me iban a engañar nuevamente.
— Eso es mentira.
— No es mentira, Alice sigue viva. Ella me mandó a alertarte— no quería verla, pero tomó mi mentón y me obligó a levantar la vista.— Madison, sé que has pasado por mucho, pero todo terminará, lo prometo. Solo, tienes que ser fuerte ¿Sí? Sé fuerte— escuchamos un estruendo en la habitación a nuestra derecha.— ahora debas ayudar a tus amigos, volveremos a vernos...
En ese momento ella empujó mi hombro y sentí como una fuerza me empujaba hacia atrás, cerré los ojos esperando la caída, pero nunca llegó, ya que al abrirlos estaba en una especie de pasillo, pero frente a mí había una puerta.
—¡Eso intento!— esa era la voz de Lucy.
Así que de este lado comencé a tirar de la puerta para abrirla, y me moví hacia atrás una vez que esta se empinó bruscamente.
Los tres entraron rápidamente y Lockwood cerró la puerta detrás de él.
Estaban tan agitados que ni me notaron ahí— ¿Hola...?— ahí es cuando me vieron.
¡Madison!— gritaron en coro. Y para mi sorpresa el primero que me envolvió con sus brazos fue Anthony.
— Yo también te extrañé— dije riendo y correspondiendo el abrazo.
— Ni se te ocurra volver a irte sola— me miró a los ojos.— menos en un lugar tan peligroso como este.
