Un Rubí sin brillo-Rubegetta

Incomodidad

Rubius pasaba mucho tiempo con Vegetta, la verdad se le figuraba como alguien interesante con quién puedes hablar de distintos temas, se reía con él y casi siempre estaban juntos.

Rubius pensó que el es un muy buen amigo, pero al pasar el tiempo entendío que Vegetta lo quería como algo más; no va a negar que era un hombre guapo y caballeroso sin embargo nunca le gustaron esos arrebatos que tenía algunas veces de tratarlo como menos o recalcar siempre lo perfecto que era.

Cuando Vegetta empezó a coquetear le, Rubius empezó a alejarse ya que no sentía que eso era correcto, sus recuerdos no vivían en su mente pero estaba seguro de corazón que ya tenía a alguien a quien amar; por lo que siempre se alejó de él cuando empezaba a coquetearle.

Cada día que pasaba Rubius veía ese rubí que cargaba en su cuello y se preguntaba que representaba y porque sentía tanta nostalgia al verlo. Le daba felicidad pero al mismo tiempo le generaba angustia, como si necesitara a una persona que no recordaba.

También se fijaba que cada que Vegetta veía ese collar, automáticamente lo veía a él; pensó que podría ser porque el tenía unos ojos verdes igual que la piedra que colgaba del cuello de Vegetta pero era como si tuviera un significado más hondo. Nunca lo entendió y prefirió alejarse de Vegetta con tal de que esté no se haga ilusiones, por qué la verdad a pesar del tiempo que pasaron juntos, Rubius jamás se fijó en él.

Rubius pensaba fielmente que Vegetta era como un niño mimado que hacía berrinches cuando no le dabas atención, esto a raíz de las veces que fue a buscar al híbrido a su casa para decirle que todas las personas del pueblo quisieran estar con él o que una persona en específico le había coqueteado en el pueblo pero relataba cómo los rechazaba porque el era mucho para cualquiera.

A Rubius jamás le agradó ese comportamiento y solo lo escuchaba por educación pero pensaba que era muy desagradable el como rebajaba a todos lo que se acercaban a él. Definitivamente Vegetta debía de tener algún problema porque no creía que una persona sana se comporte así.

A pesar de eso Rubius siempre era una persona buena y trataba de serlo con todos así no le guste el comportamiento de los demás, el jamás reprochaba ni criticaba, el era un sol dentro de ese pueblo y todos los aldeanos lo amaban por su dulce forma de ser. Todos rezaban por él y pedían un futuro próspero para él, muchas veces se ponían tristes cuando recordaban que después de la misión el se tendría que ir pero era irremediable, el tenía una vida que vivir en otro lugar, en otra dimensión.

Durante el tiempo que pasó todos los héroes se preguntaban si alguno siquiera venía de la misma dimensión o cada uno correspondía a una. Pero nunca pudieron saberlo pues no recordaban nada.

Pronto empezaron a recolectar pistas para atrapar al monstruo que había acechado Karmaland y en una batalla, sorpresivamente Staxx quedó embarazado.

Staxx tenía miedo todo el tiempo pero Rubius siempre estuvo con él apoyándolo y dándole fuerzas haciendo que este se sienta más seguro.

El día que nació Titi como fue llamado cariñosamente fue una luz para todos, en especial para Rubius que amaba a los niños.

Desde ese día Rubius y Titi siempre andaban juntos, tanto que hasta el niño había empezado a llamarlo papá.