🍄🍼 𝓢𝓪𝓿𝓮 𝓐 𝓛𝓲𝓽𝓽𝓵𝓮 𝓛𝓲𝓯𝓮 🍼🍄ᴶᵘⁿᵍᵏᵒᵒᵏ'ˢ ˡⁱᵗᵗˡᵉ ˢᵖᵃᶜᵉ

🍄07🍄

Little Kookie

Tres días más.

Desde que tuvieron la conversación Jungkook no ha querido ni quiera mirarle la cara a Yoongi, inundado en un montón de sentimientos inexplicables que lo absorben no sabe cómo mirar ni siquiera sabe cómo actuar con su mayor, que ha insistido en que al menos baje y tome sus comidas junto a él en el comedor de la casa.

Sin embargo, todo apunta a que hoy van a ser diferentes las cosas.

Cuando sus ojitos se abrieron a las 7 de la mañana con 14 minutos, Kookie no entendía ni dónde estaba ni qué debía hacer. Diez minutos después, ya con la mente más clara, Kookie se acordó de todo, pero ignoró sus recuerdos para concentrarse en algo más importante: Su pancita tenía hambre.

Su cabeza estaba un poco... Tal vez muy borrosa, y a pesar de que hubiera querido levantarse, sencillamente sus piernas olvidaron cómo hacerlo y terminó tirado en la alfombra con su boquita abierta en una O sorprendida... Esa caída había sido una sensación muy graciosa que le hizo soltar una pequeña carcajada.

Kookie no sabe caminar, pero gatear es más sencillo, así que se acomoda para hacerlo sacudiendo su colita para llegar a la puerta cerrada, un momento... ¿Cómo se abre una puerta?

Se sienta sobre sus tobillos y mira la puerta con curiosidad, ensimismado en pensar cómo abrirla se lleva su mano a la boca para empezar a chupar y babear sus deditos. Su cabecita no tiene respuestas, sabe que en lo profundo sabe como abrirla pero... No hay caso, la verdad es que Kookie no sabe.

Así que, enojado con la puerta que no se abre, agarra cualquier cosa que haya cerca (es decir, un libro que no ha leído ni mirado antes y que Yoongi le dejó) y lo ha tirado para empezar a golpear la puerta con él.

El sonido del golpe más su repetición logró sacar a Yoongi del profundo sueño en el que se encontraba, dejándolo aturdido por un par de segundos antes de volver a escuchar el mismo ruido logrando que se levantara asustado.

-¿Qué demonios?

El sonido lo guía a la habitación de Jungkook, asustado de que le haya pasado algo para que golpee así la puerta, decide ignorar toda cortesía y abrirla en busca del peligro.

Solo se encontró con Jungkook arrodillado en el piso con un libro en manos y mirada curiosa.

Kookie sonrió, LA PUERTA SE HA ABIERTO. La cosa es que ha entrado ese hombre pelinegro, sin embargo, no le importa mucho, es un hombre muy bonito. Así que, sin ganas de caminar estira sus brazos hacía Yoongi con una sonrisita para que lo alcen.

-Upa - pide, con voz tierna y chiquita.

Yoongi solo... está en shock. Definitivamente no es Jungkook grande con el que está tratando justo ahora, no, es Jungkook en su little space. Esa vocecita, esa sonrisa y ese gesto no los ha visto nunca en el joven, pero está sumamente enternecido.

-Pareces un conejito - susurra, acercándose para cargar al joven y agradeciendo su buen entrenamiento y físico para poder hacerlo.

No es un hombre que disfrute mucho de la actividad física excesiva, pero su trabajo le exige mantenerse en forma, y ahora que tiene que cargar a Jungkook, que aunque no pese mucho si le gana en altura y masa, agradece que su condición física le permita hacerlo bien.

Aunque se ve muy raro que él siendo tan bajo esté alzando a Jungkook que le gana por unos centímetros.

Jungkook se ve feliz de ser cargado, pues se acomoda bien entre los brazos de Yoongi y balbucea un poquito chupando su propia mano. Ha dejado olvidado el libro y lo ha tirado a donde sea, ahora hay algo más importante que hacer: pedir comida.