Entre Reyes y Reinas

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El sol brillaba a más no poder, todo el lugar tenía un ambiente cálido y amigable, bajo del caballo y comenzó a caminar aún sosteniendo la pequeña bolsa con monedas de oro.

Pasaban niños jugando y todo parecía que iba bien en aquel reino, y como no, si aquel lugar era la tierra suprema.

En este lugar estaban todos los Reyes y Reinas que pudieran existir, cuando todos estaban juntos se creaba un ambiente de ensueño, un ambiente indescriptible para muchos pues eran tantas las cosas y emociones que tenía que era difícil de explicar lo que era realmente.

El enorme palacio se encontraba frente a aquel caballero, apenas dio un paso en la entrada de aquel palacio y fue sometido haciéndolo caer al suelo y soltando la bolsa de las monedas de oro que llevaba con él.

-¿Quién eres y Qué es lo que haces aquí?

Una voz gruesa y bastante varonil se escuchó mientras unos soldados lo tenían en el suelo, alzó la mirada y pudo verlos, los Reyes de la Guerra.

Kim Namjoon, Rey de la Guerra, piel morena como el tronco de los más bellos árboles, ojos de dragón, cuerpo bien definido y músculos de ensueño. Poseía una enorme espada de plata con detalles de oro puro y un escudo de Bronce con el característico escudo de los Kim. Un dragón enorme.

A su lado se encontraba el otro Rey, Jackson Wang, poseía descendencia China y un cuerpo bien fornido, su espada de igual manera de plata y con detalles de oro puro y pequeñas diamantes de zafiro en el centro, una enorme cadena de oro y rubí colgaba de su cuello y su escudo de cobre tenía el mismo escudo de los Kim.

Se decía que eran hermanos pero el apellido no los unía, sin embargo ambos al ser los Reyes de la Guerra dejaban de lado sus diferencias para así poder tener la paz necesaria al momento de gobernar juntos.

Unos murmullos comenzaron a escucharse y pudo ver como algunos de los Reyes y Reinas salían a ver lo que estaba pasando.

Fue entonces que todos se abrieron paso y se inclinaron ante la gran Reina, la Reina de Reinas, la única que tenía miles de años y la única que podía mandar a los demás Reyes, la persona que mantenía todo en control y la que elegía a los próximos Reyes y Reinas en caso de que no hubiera algún heredero.

-¿Que pasa aquí? ¿Porque tienen a este honorable caballero en el suelo?

Dijo preocupada y enseguida se apartaron los hermanos, los soldados soltaron al hombre que tan solo con ver a la gran Reina se inclinó en modo de respeto bajando la cabeza.

-¿Que lo trae por aquí? El reino de Asmodeus está muy lejos de aquí Caballero.

- Gran Reina Kim Da-hyun, he venido hasta usted para pedirle su ayuda en el Reino de Asmodeus.

-¿Que es lo que pasa?

- El Rey Félix ha fallecido.

Todos los presentes se cubrieron la boca en asombro pues nadie se esperaba esa fatal noticia, La Reina comenzó a calmarlos mientras hacía que el hombre frente a ella se pusiera de pie.

- ¿Y que es lo que pasa? ¿Para que requieres mi ayuda? ¿No hay algún heredero?

- Al contrario mi Reina, hay un heredero.

-¿Entonces cuál es el problema?

- Es un niño, me temo que mi nuevo Rey no tiene los conocimientos necesarios ni mucho menos las habilidades necesarias para poder tomar el trono de un reino tan grande.

Dijo con pesar mientras esperaba que la Reina le diera una sabía respuesta a su problema, La Reina rápidamente comenzó a pensar y cuando una idea cruzó su mente miro nuevamente al caballero.

- Tengo una idea.

-¿Cuál es mi Reina?

- Aún es un niño por lo tanto no puede tomar el trono hasta que esté lo suficientemente listo, es por eso que uno de mis preciados Reyes lo orientará por el bien camino.

-¿Quién puede ser ese Rey amada Reina mía?

- Necesito a un rey que ya tenga años de experiencia, pero sobre todo que tenga los conocimientos necesarios y el cariño suficiente para poder guiarlo correctamente.

Dijo mientras comenzaba a ver a todos los Reyes y Reinas frente a ella, paso por el Rey de la belleza, el hijo de Venus, se detuvo un momento en el Rey de la sabiduría, así también con el Rey de Los diamantes pero ninguno lograba convencerlo.

Se quedó quieta aún mirándolos a todos y fue que lo vio, como siempre brillando entre todos y haciéndose resaltar con aquella sonrisa, el era el perfecto para poder ayudar a nuevo Rey.

- Perfecto.

Dijo emocionaba y comenzó a caminar entre los Reyes y Reinas que aún seguían inclinados ante ella, sonrió cuando lo tuvo enfrente suyo y tocó su hombro haciendo que el Rey alzará la cabeza y se pusiera de pie.

La Reina camino de regreso al caballero y vio que el Rey se quedaba en el mismo lugar de pie, resaltando entre todos y todas.

- Tu solución está aquí. Para que pequeño Rey pueda aprender a dirigir su Reino le doy la tarea a mi preciado Rey Jung Hoseok, el Rey de la esperanza y hijo del Sol, él a partir de mañana enseñará y mostrará a tu pequeño como debe gobernar y así que pueda obtener su corona.

El Rey un poco disgustado solamente bajo la cabeza, las órdenes que daba la Reina Da-hyun eran únicas y por lo tanto no se podía luchar contra ella, aún siendo un Rey poderoso o incluso fuerte nadie podía desobedecer su palabra.

- Gracias mi amada Reina.

Musitó el caballero inclinándose ante ella y besando su mano en modo de respeto y agradecimiento, tomo el pequeño saco de monedas del suelo y lo sacudió antes de tratar de ponerselo en su delicada mano.

- El oro no es necesario, esto que viniste a pedir no merece un pago, regresa al Reino de Asmodeus y prepara todo para que el Rey de la Esperanza llegue mañana por la mañana.

Aquella sonrisa que adornaba su rostro de la reina hacía que todos se sintieran bien y que todo se calmara, el hombre agradeció una última vez y sin más se dio la vuelta para ir hacia el reino al que pertenecía y así iniciar el proceso de su pequeño Rey.

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- Jungyuli3312💜