Jeff The Killer, Jane The Killer, Homicidal Liu. Después de compartir un pasado traumático, los tres se ven conviviendo en una misma casa mientras intentan solo existir con lo que les dejó su vieja amistad adolescente.
Mientras Jane está convencida...
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•Capítulo 27 "Metanoia"•
Después de una cena bastante tranquila y con un entorno romántico, había conseguido sacarse a Jeff de encima por una noche, no estaba y no estaría por un buen rato, le regaló una entrada de cine para que se entretuviera en un pase nocturno con una buena película de acción, de aquellas que le gustaban.
La noche se veía encantadora, en una habitación iluminada por velas, pero aquello no era más que el ambiente para su oscuro plan que por desgracia para otros saldría bien. Lo tenía todo preparado para destrozar el pequeño corazón de su hermano, pequeño y egoísta, insensible a su parecer, quería arrebatarle algo que si bien mal no le hacía, conocía bien a su hermano. La comida fue excelente, preparado por él en su día libre, ella lo disfrutó y ahora tomaban el postre algo nervioso.
—Muchas gracias Liu, es la primera noche que paso tan tranquila después de mucho.
Sonrió, escuchar aquello le llenaba el alma. Metió la mano en su bolsillo acariciando la pequeña cajita de terciopelo con la yema de sus dedos, deseoso de ya sacarlo y quitarse un peso del pecho. Sentía sus mejillas arder por algún motivo, se sentía bastante feliz como si una ola estuviera llevándose todos sus males, dejando salir todo lo que estaba encadenado como un barco mal amarrado.
—Si, quería que tuvieras un poco de paz.
Sobretodo lejos de él. Tenía que tomar valor, no sabía porque le costaba tanto ya que tampoco era una propuesta, estaba muy nervioso pero aún así si debía de hacerlo se hacía con miedo.
—Sabes Jane, tengo un regalo para ti.
Sacó la cajita, al fin sintiéndose algo más libre. La ojiesmeralda miró el pequeño recipiente con curiosidad, era obvio que se trataba de una joya pero no se lo había imaginado, aquello fue el verdadero postre sorpresa. Al tomar aquello entre sus dedos y abrirlo, susurró un pequeño "gracias" al que Liu no respondió, solo sonrió. Dos anillos parecidos a los de compromiso estaban dentro, sobre una almohadilla oscura que causaba que todo brillara más.
Su rubor estaba aumentando por segundo, cada vez más acelerado por dentro. Quería cubrirse, puso una mano sobre su boca y sus mejillas. Jane tomó uno de los anillos, aquél decorado con un pequeño diamante en su interior.
—¿Por qué?
—Es solo un regalo, te lo mereces.—Le sonrió.—Además es tu billete a salir de aquí.
Su rostro representó la confusión que sentía en menos de un segundo, pensó en su se refería a venderlo y así tener una gran cantidad de dinero, o irse juntos a otro lugar lejos de su hermano o con él, pero olvidando el trabajo, los delitos y en una vida nueva.
