FirstBorn °Kookmin°

08

CAPÍTULO 08

Jimin se mantuvo acostado sobre la cálida cama observando a través de la ventana la tormenta que continuaba por dos días consecutivos, el recuerdo de la conversación del día anterior presente en su mente y sus dedos contra sus secos labios lo hicieron sentirse avergonzado.

Un ruido que reconoció a la perfección lo obligó a moverse sobre la cama para quedar sentado, la puerta de la habitación se abrió permitiéndole ver ingresar al hombre con un bulto envuelto entre sus brazos.

La alegría burbujeando desde el interior de su cuerpo como respuesta al ver al pequeño, no había ruido proviniendo de este más que ligeros balbuceos ahogados.

— Cumpliste tu palabra — murmuró Jimin sintiendo la necesidad de abandonar la cama con prisa y arrebatarle al pequeño.

Jeon lo observó desde la lejanía a la espera de algún movimiento suyo.

— Es cierto, cumplí mi palabra — la respuesta de este llamó la atención de Jimin — eres libre.

Con un parpadeo perezoso Jimin sintió el oxígeno abandonar sus pulmones, la alegría que esperaba sentir no apareció.

Extraño.

— ¿Soy libre? — cuestionó en respuesta, su voz con un tono de desconfianza.

El más alto se movió hacia un costado permitiéndole ver a través de la puerta el pasillo, él no estaba mintiendo al parecer. La mirada de Jimin cayendo contra el pequeño bulto envuelto que Jeon no tenía intención de soltar pronto.

— Eres libre, puedes irte ahora Jimin — mencionó esperando por sus movimientos.

— Pero el pequeño — masculló enroscando sus dedos con fuerza en la colcha de la cama — ¿qué va a suceder con él?

— ¿De qué hablas? — la cabeza de Jeon se ladeó hacia un costado — el pequeño se quedará aquí.

— No puedes — se apresuró en decir el más bajo enseñando una expresión de miedo en su rostro.

Jimin se impulsó para abandonar la cama y quedar de pie al costado de esta. Su mano derecha elevándose a la altura de su torso para enroscar sus dedos.

— ¿Estás seguro de eso? — Jeon formó una expresión aburrida cuando Jimin avanzó un par de pasos hacia el frente con la clara intención de acercarse a él.

— Ya obtuviste lo que querías, el pequeño no tiene la culpa — entre cortos pasos Jimin logró obtener un vistazo del menor quien estaba despierto y un bostezo llenaba su rostro.

— Eso ya no es de tu incumbencia, ahora vete de aquí — Jeon insistió una vez más logrando que Jimin notara el repentino cambio en su voz.

Estaba impacientándose.

— Yo no puedo dejarlo aquí — con una actitud terca Jimin se detuvo frente a Jeon quien no lograba inquietarse con la cercanía ajena.

— Lo harás — aseguró — sáquenlo de aquí — agregó Jeon echando un vistazo fuera hacia el pasillo.

Jimin sintió su brazo ser tomado con fuerza logrando que su cuerpo se tambaleara fuera de la habitación, girando el rostro asustado obtuvo una última visión de Jeon sosteniendo al bebé en sus brazos.

— ¡No! ¡Suéltenme! — gritó Jimin tratando de zafarse bruscamente del agarre de los hombres de Jeon — ¡no puedes tenerlo! — su voz siguió resonando a través del pasillo hasta que Jeon ya no logró escucharlo más.

Con un fuerte empuje Jimin tropezó fuera de la gran mansión en donde pasó las últimas semanas, desistió de hacer cualquier movimiento brusco ya que los guardias estaban allí impidiéndole el paso.