Los días continuaron, y sus sentimientos se asentaron.
No ocurrió demasiado más allá de compartir besos ocasionalmente.
Mantuvieron una rutina cómoda, en donde se interactuaba y se brindaba espacio cuando era necesario. Aunque, en igual medida, las inseguridades sobre intenciones o interese se aligeró, al optar por una dinámica basada en la confianza.
Wei WuXian hacia réplicas de Virtud y Conducta, de acuerdo a lo establecido en su castigo tantos meses atrás.
En los días en que Wei WuXian cedía a la procrastinación y el aburrimiento, realzaba dibujos. Mientras, Lan WangJi se dedicaba a sus asignaciones.
Cuando el coqueteo descarado de Wei WuXian, y su espina traviesa obraba en él, se permitía caer cerca del espacio de Lan WangJi, posándose en su regazo.
Lan WangJi que era débil a las exigencias de Wei WuXian. Se permitía pasar los dedos por el cabello espeso. Wei WuXian, una persona que actuaba en función de sus propios deseos, le acariciaba la mejilla. En ocasiones especiales contaba historias de infancia e incluso del clan que le acogió.
Otro detalle que conmovió a Lan WangJi, fue la naturalidad con la que Wei WuXian lo abrazaba.
Era tan natural, tan casual, como si estuviese acostumbrado a hacerlo.
En un inicio, WangJi se tensaba. Un par de veces trató de alejarse. Sin embargo, terminó cediendo en su propia fascinación. Ya que, a excepción de Wei Ying, nadie le había abrazado desde la muerte de su madre.
Cuando el estado de ánimo de Lan WangJi era bueno, se inclinaba por la música.
La música resultaba liberadora. Expresaba los sentimientos que se contenían en su pecho sin oportunidad de escape. Wei WuXian elogió su habilidad, alabándolo ante la pureza de sus notas.
"Absurdo" se quejaba medio en broma, incapaz de ocultar el enrojecimiento en sus orejas.
Wei WuXian se volvió mimado a raíz de la indulgencia de Lan WangJi. Si le encontraba leyendo alguno de los poemarios de Lan An, pedía que le recitará alguno.
Lan WangJi no tenía buena voz, por lo cual prefería negarse. En vez de decepcionarse, Wei WuXian se motivó a recitar para él. Lo que a su vez hizo que el corazón de WangJi latiese desbocado por la profundidad de sus palabras.
Pasado el mediodía, cuando Wei WuXian debía partir para lecciones de la tarde o cacerías nocturnas, se despedía de Lan WangJi besando su mejilla, y abandonando por la ventana.
¡Nunca por la puerta!
En soledad, Lan WangJi reprimía los vestigios de una sonrisa discreta, tentando la calidez de la mejilla que había sido besada por Wei WuXian.
La presencia del primer discipulo Jiang fue interpretada como un tifón que golpea hasta destruirlo todo. Pero también, se sintió como la ropa secada al sol y los brotes abriéndose durante la primavera. Hubo color y esperanza para alguien como WangJi, que había asumido una vida de resignación en su solitario encierro.
"Las lecturas de cultivo terminarán pronto" señaló XiChen.
Lan WangJi titubeó. El contenido de la tetera apenas derramó una gota, y Lan XiChen lo notó.
Se bebió de la combinación de especias de temporada y tras un largo silencio el primer jade preguntó: "¿Cómo te hace sentir?"
Lan WangJi no encontró las palabras apropiadas para describir su sentir.
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Llevar el peso de este anhelo
RomanceSe dice que sobre las montañas, más allá de las nubes; en tierras donde alguna vez yacieron inmortales de cientos de años, había un joven. Este joven fue bendecido con belleza sobrehumana y gran talento para las artes. Sin embargo, nadie conocía s...