Llevar el peso de este anhelo

Epílogo

Como era de esperar, se casaron.

Tuvieron una ceremonia acorde a las normas de Gusu Lan. Los rumores fueron contenidos de mala gana tras el escándalo vicioso de que Wei WuXian y Lan WangJi compartían actividades nocturnas bastante ruidosas.

Lan QiRen se negó a ver a la cara a la pareja por un tiempo, después de todo las habitaciones de Lan QiRen no estaban lejos del JingShi.

Hicieron las inclinaciones, los rituales, se ataron cintas y se les consideró casados.

Los rumores sobre Yunmeng Jiang llegaban a Yunshen Buzhichu, y no fue del todo grato encontrar a los Jiang en el banquete de celebración. Sin embargo nada se podía hacer tratándose de una de las grandes sectas.

La doble protección de Lan y Nie, hizo de Wei WuXian una presa intocable. Yu ZiYuan o cualquiera que ansiara poner una mano sobre Wei Ying tendría que lidiar con la persecución de clanes prestigiosos.

Visitaron QingHe durante el verano y Qishan en primavera.

Después de un año de matrimonio, decidieron abandonar Yunshen Buzhichu, para vivir con mayor libertad.

Lan WangJi sintió el peso de la responsabilidad y el sometimiento de los ancianos, caer de sus hombros cuando sus pies se apartaron de los muros estériles de Gusu Lan.

Lan XiChen lamentó la partida, mostrando genuina preocupación y alegría. Como regalo por las nupcias proporcionó un espacio en las cercanías de Gusu, pero lo bastante alejado para la vida de retiro en el campo. De esta manera ambos hermanos tenían la oportunidad de visitarse con frecuencia.

Y Lan WangJi agradeció la consideración.

Esta nueva libertad, con la que Lan WangJi fantaseó en sueños durante su adolescencia, lo tuvo flotando en una nube de satisfacción y realización.

Después de todo, su único anhelo había sido la vida sin retenciones y alguien a quien llamar confidente de vida.

Había alguien a su lado, Wei WuXian, que le veía como un igual y le adoraba con la devoción de un creyente iluminado. Aún así, la vida doméstica permitió experimentar situaciones que le hacían sentir menos como una estatua de perla y jade, más como una persona cualquiera.

Experimentando la vida en pareja. Con desacuerdos, discusiones, caricias, intimidad emocional y física, comunicación y confianza.

Bien, quizá hacían algún par de cosas diferentes al resto de parejas, pero eso solo eran detalles. En igual medida, Wei WuXian se había dedicado en el año de planificación de la cabaña, en implementar toda clase de adaptaciones que permitiesen una vida accesible que facilitara las actividades independientes de Lan WangJi. De esta manera, fue capaz de desenvolverse sin problema, sin necesidad constante del apoyo de Wei WuXian o cualquier otra persona. Lo que a su vez le permitió experimentar en múltiples ámbitos de los que se probó por falta de acondicionamiento.

Por las noches, Wei WuXian masajeaba sus piernas y espalda para aliviar la tensión de la postura en la silla, y lo tomaba cual amante apasionado hasta dejarle estupido balbuceando sin sentidos.

En el día, Wei WuXian se dedicaba a sus inventos, creando toda clase de propuestas ingeniosas para mejorar la vida de los cultivadores y no cultivadores.

Cuando Wei Ying no estaba trabajando en talismanes o matrices, se dedicaba a negociar el precio de las patentes con Nie Huaisang, que parecía tener talento en los negocios y la distribución de sus proyectos. De esta manera Wei WuXian logró amasar una fortuna por mano propia, dejando de lado la inquietud a ser indigno e inadecuado por no poseer nada a su nombre.

Tal como había prometido, Wei WuXian pescaba, cazaba y cortaba leña. Incluso cultivaba papas en sus campos. Lan WangJi se dedicó a la lectura, al tejido, a crear piezas en su guqin y en actividades que le satisficieron como cocinar, regar las gencianas y nísperos, o cuidar de sus conejos y las gallinas que hurto, y más tarde Wei WuXian pago, de una granja local.

En el verano, Lan WangJi se sentaba en el pórtico, bajo la sombra de un tejado, sosteniendo algunos conejos, mientras esperaba el regreso de Wei WuXian, para continuar con su todos los días y una vida plena con la persona que amaba.

Que le eligió y lo había elegido.