Per Aspera Ad Astra || #1 ✔

Capítulo 13

Varias horas antes
Nueva York

James se paseaba por el salón del ático, ignorando la mirada penetrante de Loki. Sabía que Hadriana y Tony eran más que capaces de encargarse ellos mismos del Mandarín y Killian, pero él quería ayudar. Hadriana le había ayudado tanto desde que había descubierto quién era. Le había devuelto la vida; había acogido a Loki sin rechistar después de que se estrellara frente a su piso franco.

James suspiró y se pasó las manos por el pelo, haciendo una mueca por lo largo que era. Tendría que cortárselo cuando volviera a salir en público. Se lo ató distraídamente hacia atrás mientras pensaba en sus opciones. Florida estaba muy lejos y no tenía forma de llegar hasta allí.

"Por favor, deja de pasearte, James, me estás mareando -soltó Loki, llevándose los dedos a los ojos.

"Tengo que ayudarles -dijo James, deteniéndose bruscamente. Se cruzó de brazos, con el miembro metálico zumbando.

Loki bajó las manos, inspeccionando el esmalte dorado oscuro de sus uñas: "¿Y cómo supones que lo haremos, James? Si tuviera pleno acceso a mi seiðr estaríamos allí en un abrir y cerrar de ojos".

¿"VIERNES"? preguntó James, echando un vistazo a la cámara más cercana.

"¿Sí, Jefe?" gorjeó VIERNES alegremente.

"¿Puedes avisar a Nick Fury de lo que está pasando? preguntó James, ignorando la aguda mirada de Loki.

"Desde luego, Boss Man", dijo felizmente FRIDAY, "El director Furia desea hablar contigo, Boss Man".

"Pásamelo", dijo James, apretando los dientes. Loki le miró con una ceja levantada.
"James Buchanan Barnes murió al caerse de un tren de mercancías en los Alpes", dijo Furia con severidad en lugar de saludar.

"No, no morí. Sobreviví a la caída gracias al suero que me inyectó Zola cuando capturó a la Uno-Siete y fue capturado por los soviéticos y entregado a HYDRA. Sobrevivieron después de la guerra y me torturaron y lavaron el cerebro para convertirme en su asesino mascota: El Soldado de Invierno. HYDRA me envió a asesinar a Hadriana Stark hace casi tres años y ella decidió deshacer todo lo que hizo HYDRA -explicó James rápidamente-.

Furia guardó silencio unos instantes: "FRIDAY acaba de enviarme los documentos, sargento. Desde luego te pareces a James Barnes. ¿Qué está pasando entre Tony y Hadriana?".

James suspiró aliviado y se apresuró a explicar lo que ocurría; Loki interrumpía aquí y allá con comentarios sarcásticos, pero una vez hubo terminado, Fury se puso a maldecir como un loco.

"Esos malditos críos", se quejó Furia, "llegaré en una hora, sargento. ¿Tienes armas?"

"No, pero las necesitaré", dijo James, rodando los hombros.

"Sargento. ¿Sabe Rogers que estás vivo?" preguntó Furia.

"No, señor. Quería asegurarme de que todo lo que había hecho HYDRA estaba deshecho y de que tenía la cabeza bien puesta antes de decírselo", explicó James, dirigiéndose a su dormitorio para recoger el traje de Soldado de Invierno que había guardado.

"Comprensible. Entonces no le traeré. Pero traeré a Hill y a Coulson -dijo Fury enérgicamente-. Nos vemos dentro de una hora".

James se puso la ropa, abrochándola con fuerza, y deslizó las manos dentro de unos guantes de cuero sin dedos. Se ajustó las correas alrededor de las muñecas y apretó las manos. Se ajustó la funda del cuchillo en la cadera izquierda y cogió el único arma que había guardado, un cuchillo corto pero afilado, y lo deslizó en la funda.

En la sala de estar, Loki vestía sus galas de batalla. El cuero negro, verde y dorado ceñía su esbelto cuerpo, y su expresión era fría. James le hizo un gesto con la cabeza, y Loki sonrió secamente.