12. «¿A dónde vamos con esto?»

853 37 18
                                    

¡Maratón! Si Wattpad te ha traído aquí directamente, ve primero a leer los capítulos anteriores y después vuelves, que te espero <3

MARATÓN 3/3

Es el lunes más pesado de mi vida, y eso que aún es medio día. Esta mañana he ido a dejar el currículum a seis sitios distintos porque como por internet parece que no le gusto a la gente, he pensado que tal vez si ven lo agradable que soy en persona me dan una oportunidad. Todos los sitios a los que he ido tenían un cartel diciendo que buscan camarera; me sorprende la cantidad de lugares que buscan gente en verano, supongo que se debe al turismo y a que en vacaciones hay más tiempo de ocio.

Han dicho que van a mirarlo y que ya me llamarán si les gusta mi perfil. Cómo no me llamen de ningún sitio me va a dar la mayor depresión de mi vida.

Tengo los pies destrozados de tanto caminar. Estoy sentada en el banco de una plaza esperando a Mel. Hace bastante que no nos vemos y hemos quedado para charlar un rato; creo que Axel no le ha contado nada porque me ha preguntado de forma muy insistente si ha pasado algo; y yo no estoy muy segura de qué tanto puedo contarle sin molestar al ricitos.

Miro el móvil mientras espero y me frustro porque no recibo ningún mensaje. Anoche desbloqueé a Axel, pero no me ha escrito y yo a él tampoco.

Lo único que llega es un mensaje de Melinda diciendo que va a demorar veinte minutos.

Resoplo, pero mejor estar aquí esperando que estar aguantando a mi madre y a ese señor rajar de mí. Ahora mismo soy su único tema de conversación y no dicen nada bueno. Iba aquedarme hasta el miércoles y pasar una semana completa, pero creo que voy a volver mañana, mamá ya no está sola y yo paso de estar aguantando esto.

Al cabo de un rato que paso mirando Tiktok veo aparecer a Melinda, viene corriendo como puede con los tacones de sus oscuras botas. Qué poca empatía, sabe que soy más bajita que ella y encima se pone tacones con plataforma.

Y yo con mis zapatillas planas porque priorizo la comodidad.

—Perdona, tenía que ayudar a mi madre con unas cosas —se excusa mientras me abraza y yo correspondo contenta. Hace bastante que Mel y yo no quedamos, llevamos mucho sin darnos un abrazo.

—No te preocupes —respondo honesta.

—Oye pero que guapa vas —comenta alejándose para darme un vistazo de arriba abajo, sus oscuros ojos me barren—. ¿De dónde vienes?

—He ido a dejar el currículum en varios sitios —digo descontenta y Mel pone una mueca.

—Axel me lo comentó anoche —chasquea la lengua y suspira. Yo le miro confusa porque no sabía que Axel le había estado hablando de mí a su hermana y porque anoche estuvimos hablando él y yo por teléfono—. Por su culpa casi me da un infarto, que estaba yo en el sofá de la sala mirando lo de la matrícula, y me llamó sin avisar, yo ni siquiera sabía que tenía el móvil con volumen —me cuenta divertida, una ligera risa se le escapa.

Después de hablar conmigo llamó a su hermana. Dijo que no podía dormir y yo no quise hablar con él. Me siento fatal.

—¿Qué te contó? —le pregunto a Mel mientras la sigo. Habíamos quedado en que íbamos a ir a comer a no sé dónde.

—No mucho, dijo que estabas agobiada y que estaba frustrado porque no sabía cómo ayudarte —responde sin pensarlo mucho, mi pecho se aprieta. Axel es un amor—. Tú no te ralles, ya verás que encuentras trabajo en nada.

—Eso espero —respondo bajo y suspiro—. ¿Cómo llevas lo de la matrícula?

—Pues creo que bien, es mucho lío de papeles, pero Chris me ayuda mucho. Madre mía, aún no me lo termino de creer, y eso que llevamos bastante tiempo planteándonoslo.

Soy Más Que Una Sumisa [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora